Bruselas avisa al nuevo Gobierno: hay que aprobar recortes por 7.000 millones

Hubo varapalo por el Proyecto de Presupuesto de 2016 y sigue habiéndolo. Algo mitigado, cierto, pero golpe político al fin y al cabo. Ayer se confirmó que lo sucedido la semana pasada en el Colegio de Comisarios, cuando se frenó la crítica opinión sobre las nuevas cuentas de Rajoy, fue una desautorización de Jean-Claude Juncker a la forma de actuar del comisario Pierre Moscovici pero no a las cifras que advierten de que España está en «riesgo» de volver a incumplir los objetivos de déficit fijados por el Pacto de Estabilidad y Crecimiento (PEC) para este año y, sobre todo, para el que viene.

De hecho y según Bruselas, el Gobierno que salga de las urnas el 20 de diciembre deberá aprobar en el mejor de los escenarios ajustes adicionales por valor de 7.000 millones. El terreno de juego ya está marcado y en esto del déficit, digan los que digan los candidatos en campaña, sólo hay un árbitro: la Comisión Europea.

Quien pensara que Juncker o incluso el propio Rajoy había frenado el varapalo a España para maquillar políticamente su opinión sobre el Presupuesto se equivocaba de plano.

Las cuentas no salen en Bruselas. Según el sacrosanto PEC, Madrid tiene que cerrar 2015 con un déficit del 4,2% y 2016, con el 2,8%. Los expertos comunitarios, por contra, hablan del 4,5% y del 3,5% al no compartir del «optimismo» mostrado por el Ejecutivo del PP. No hay que olvidar que España, junto a Francia, continúa siendo el peor país de largo en esta faceta y que desde 2007 es incapaz de bajar del 3% previsto en la normativa. Además, el comodín de las prórrogas está más que agotado ya que Zapatero obtuvo una y Rajoy, dos, así que más allá del ‘affaire Moscovici’, Bruselas sigue creyendo que España tiene un problema y no menor.

Mismo contenido

Ayer, lejos de recular, el comisario de Economía se reafirmó en lo dicho la semana pasada y negó que Juncker le pusiera contra la espada y la pared. «¿Desautorización? Las cifras siguen siendo las mismas y el contenido del informe el mismo. Quien busque una caza de brujas, aquí no hay política, nos basamos en cifras y los comisarios no hablamos en función de nuestra afinidad ideológica ni de nuestro nacionalidad», recalcó Moscovici, señalado desde el Gobierno por haber emitido una valoración «partidista» sobre el Presupuesto antes de que el Colegio lo aprobase formalmente 24 horas después. Y para que no hubiera dudas al respecto, el francés, que se arrancó en español a modo de guiño, leyó de forma textual párrafos de la opinión aprobada de forma unánime por sus colegas. «La Comisión invita a las autoridades nacionales a ejecutar estrictamente el presupuesto de 2015 y que tome las medidas necesarias en el proceso presupuestario para asegurar el cumplimiento del presupuesto de 2016».