Luis Fernando Lanaspa: "La financiación es un problema para las PYME, pero es prioritario"

El director general de Economía del Gobierno de Aragón, Luis Fernando Lanaspa, ha asegurado que la financiación de las pequeñas y medidas empresas aragonesas y para los autónomos sigue siendo un problema pero ha recalcado que no es "prioritario" ni está en el "top ten" de las dificultades de las pyme.

"Entendiendo que los mecanismos y herramientas de financiación ya existentes son de utilidad y cumplen su cometido" ha apuntado Lanaspa en una comparecencia ante la Comisión de Economía de las Cortes quien ha anunciado que el Ejecutivo va a analizar la forma en la que dar cumplimiento a la proposición no de ley aprobada, a iniciativa de Podemos, el 22 de octubre de 2015 para poner en marcha el organismo público de crédito y financiación.

Lanaspa ha asegurado que quizá no sería necesaria la implantación de un nuevo organismo con naturaleza de entidad de crédito, sino que éste adoptase la forma que ya tienen algunas sociedades del sector público aragonés.

En todo caso, se están realizando informes para analizar la petición que las Cortes hicieron al gobierno en este sentido, y a lo que se destinarán 150.000 euros gracias a una enmienda transaccionada en los presupuestos de la comunidad para 2016.

Lo más "sencillo" para Lanaspa sería "reorganizar y fortalecer" los mecanismos ya existentes para que esta nueva entidad pudiera captar fondos del ICO o del BEI.

Y cualquier organismo que se cree, ha añadido, debería operar por criterios de "rentabilidad" y operar bajo las premisas de profesionalidad, independencia, control y participación.

Lanaspa, además, ha insistido en la necesidad de dar a conocer los mecanismos de financiación ya existentes, con una importante labor de difusión puesto que, según ha dicho, gran parte del entramado empresarial aragonés desconoce la existencia de estos mecanismos de financiación.

Las sociedades públicas que se dedican a la concesión de crédito, además, no han dejado de conceder financiación a ninguna empresa por falta de fondos, sino sólo porque los proyectos presentados no se han considerado viables.