La inversión y el consumo elevan el PIB al mayor ritmo desde 2007
El indicador del crecimiento de la economía española se situó en un 3,2% durante 2015.
D. Valera | Madrid
El consumo y la inversión son los dos pilares sobre los que se asentó el crecimiento de la economía española en 2015. El buen comportamiento de estos dos indicadores fueron la clave para compensar la aportación negativa del sector exterior y lograr un incremento del PIB en tasa anual del 3,2% el año pasado, el mayor avance desde 2007. Es decir, alcanzó un ritmo precrisis, aunque el avance fue más elevado en la primera mitad del ejercicio —con tasas de crecimiento trimestral que llegaron al 1%— que en el segundo semestre, donde las subidas fueron del 0,8%, según los datos de contabilidad nacional del cuarto trimestre publicados este jueves por el INE.
Este impulso se debió a la fortaleza de la demanda interna, que tuvo una contribución al PIB de 4,1 puntos. En concreto, el gasto de los hogares experimentó un crecimiento interanual del 3,5% gracias al repunte final del año muy influenciado por la campaña de Navidad. Por su parte, el gasto de las administraciones públicas presentó una variación anual del 3,7%, siete décimas superior a la del trimestre precedente. El otro puntal del crecimiento fue la formación bruta de capital fijo, es decir la inversión, que registró un crecimiento del 6,4%. Sin embargo, la inversión en construcción disminuyó seis décimas y pasó del 5,2% al 4,6%. La inversión en bienes de equipo presentó un crecimiento del 10,9% en el cuarto trimestre, frente al 11,2% del trimestre anterior.
El sector exterior, la otra gran pata que compone el PIB, volvió a tener una aportación negativa (-0,6) a pesar de que en el último trimestre las exportaciones aceleraron su ritmo de crecimiento, pasando del 4,5% al 5,3%. Sin embargo, este incremento fue insuficiente para compensar el aumento de las importaciones un 7,7%. La demanda exterior mantuvo una contribución positiva a la economía en los peores años de la crisis, justo lo contrario que la demanda nacional. Empero, cuando a partir de 2014 el consumo empezó a repuntar las tornas se invirtieron poniendo en entredicho el cambio de modelo productivo en el que el sector exterior debería jugar un papel más importante.
Sobre el empleo
Por otra parte, los datos del INE también muestran que la creación de empleo en el cuarto trimestre se desaceleró una décima con un crecimiento del 3%. En cualquier caso, supone un incremento neto de aproximadamente 495.000 empleos equivalentes a tiempo completo en un año. Sin embargo, la tasa de paro en España (20,9%) es la segunda más alta de la UE, sólo por detrás de Grecia.
Si se analiza el empleo por sectores, los servicios mantuvieron su ritmo de crecimiento (3%) y la situación más favorable se dio en la agricultura con un incremento del 5,3%. Por su parte, la ocupación en la industria aumentó hasta el 2,3%.