Las horas extra impagadas llegan a su tope desde 2008
Son ya mayoría (56%) frente a los que cobran por rebasar su jornada.
A. B. | Madrid
La economía parece haber salido de la crisis, aunque lo ha hecho con claros altibajos y el mercado laboral es el que menos lo está notando. Un claro ejemplo son las horas extra que no pagan las empresas pese a haberse cubierto fehacientemente.
El año pasado se dejaron sin abonar 3,5 millones de horas a la semana, su nivel más alto desde 2008 (3,7 millones). Así lo denunciaron ayer desde CC OO en un informe donde, basándose en los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), llegan a hablar de «explotación laboral». Eso sí, estaría alejada del «perfil habitual de precariedad vinculado a una inserción en peores condiciones» dentro del mercado de trabajo.
En esos últimos ocho años el número de horas extra se ha reducido de forma considerable, pero ha sido solo en las pagadas (que han caído a la mitad) puesto que las que no se cobran se mantienen en niveles parecidos. Por eso son ya mayoría:_el 56% de las 6,3 millones que se trabajan de más cada semana.
Desde el sindicato se apunta que estamos ya ante «un comportamiento estructural y permanente, con menor grado de fluctuación por la recesión económica». Asimismo, se concentra de forma especial en el sector privado y, sobre todo, dentro de las actividades de servicios.
El perfil tipo del trabajador que no cobra sus horas extra es el de un hombre de mediana edad, con contrato indefinido y jornada a tiempo completo. Suelen ser oficinistas o empleados de perfil técnico, incluso algunos mandos. Eso sí, solo el 5% de los 14,8 millones de asalariados que tiene el país trabaja más de lo estipulado.