Los autónomos temen que tenga lugar un aumento de la morosidad
Lo esperan en las grandes empresas al acabarse las deducciones fiscales de las que gozaban.
lucía palacios | madrid
Los autónomos encaran el nuevo año preocupados por lo que viene siendo su caballo de batalla: la morosidad, puesto que no solo prevén que siga estando muy presente en este colectivo, sino que además vaticinan un empeoramiento. Y lo estiman así tras la decisión del Gobierno de eliminar importantes deducciones del Impuesto de Sociedades a las grandes compañías para poder cumplir con el déficit. «Tememos que las nuevas trabas a las grandes empresas puedan llevar consigo un importante aumento de la morosidad con los autónomos y que afecte directamente al eslabón más débil», explica el presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor. Y es que precisamente son las grandes empresas quienes más tardan en pagar a sus proveedores: 126 días de media, más del doble de lo que establece la ley. Por esto ATA les acusa de financiarse de sus proveedores y del propio Estado al «deducirse impuestos que no han pagado». Lo que sí confían es que las Administraciones Públicas continúen rebajando los periodos medios de pago, actualmente en 77 días, aún así muy por encima de lo que dicta la ley.
Pese a todo, la federación de autónomos espera que 2017 sea «un año clave para el colectivo», tras un 2016 «legislativamente muerto» a consecuencia de la ausencia de gobierno. Así, confía en que el próximo año se creen unos 400.000 empleos, uno de cada cuatro bajo el paraguas de este colectivo. En este sentido, se sumarán 30.000 nuevos autónomos y se generarán unos 60.000 nuevos puestos de trabajo asalariado. Sin embargo, desde ATA resaltan que se trata de un crecimiento un 20% inferior al registrado en 2016, puesto que este año estiman que se cerrará con 500.000 nuevos empleos, de los cuales 105.000 habrán sido gracias a los autónomos.
Pero también hay razones para el optimismo: los niveles de confianza del consumidor continuarán creciendo mes a mes, lo que permitirá seguir con la recuperación del comercio, uno de los sectores más afectados por la crisis.
En este sentido, Amor también reconoce como «positivo» que se sigan manteniendo los aplazamientos de IVA de hasta 30.000 euros y que no se hayan subido ni el IVA ni los impuestos a pymes y autónomos.