Rato y Blesa eluden la cárcel por su actitud «intachable» en el juicio
La Audiencia descarta cualquier acción preventiva para los expresidentes de Bankia y Caja Madrid.
José M. Camarero | MAdrid
Los expresidentes de Caja Madrid y Bankia, Miguel Blesa y Rodrigo Rato, no tendrán que cruzar por ahora las puertas de la cárcel a pesar de la pena de seis años y cuatro años y medio de prisión, respectivamente, a la que les ha condenado la Audiencia Nacional por el desfalco con las tarjetas ‘black’ de la entidad. Tras la ‘vistilla’ que tuvo lugar ayer, el órgano judicial no aceptó las medidas cautelares solicitadas por la Fiscalía contra el que fuera máximo ejecutivo del grupo entre 1996 y 2010, en las que pedía prisión preventiva eludible bajo fianza de 100.000 euros. También hizo caso omiso a la petición de prisión de las acusaciones populares contra el que fuera vicepresidente del Gobierno de José María Aznar.
Los magistrados de la sección cuarta de la sala de lo penal descartan imponer cualquier acción preventiva a Miguel Blesa alegando el «comportamiento intachable» que tuvo durante el proceso judicial. Los jueces también insisten en que, en el caso de Rodrigo Rato mantuvo una postura «absolutamente cabal» durante el juicio, que se extendió desde octubre de 2016 hasta el pasado mes de febrero.
La Audiencia Nacional se fía de la actitud de los dos condenados por el delito de apropiación indebida, tras gastar 436.688 euros, en el caso de Blesa, y 99.055 en el de Rato, justificándose en que no hay «necesidad de adoptar medidas cautelares» al no existir circunstancias excepcionales que así lo respalden. Por ahora, evitan la cárcel a la espera de que sus abogados recurran la sentencia del pasado 23 de febrero, cuya tramitación podría llegar al Tribunal Supremo, lo que provocaría la dilatación del proceso hasta que se pronuncie de forma definitiva.
Los detalles
El argumento esgrimido por el fiscal del caso, Alejandro Luzón, para solicitar la prisión preventiva para Blesa había sido el riesgo de fuga, aunque no el de la destrucción de pruebas o la reiteración del delito cometido. Sin embargo, los jueces consideran que no existe la posibilidad de que se ausente de sus responsabilidades jurídicas porque, más allá de su actitud impoluta, «sus bienes se encuentran embargados» y porque sus circunstancias personales «revelan inequívocamente un arraigo en su país en todos los órdenes de la vida». De hecho, su abogado alegó que Blesa «siempre ha estado viviendo en este país, carece de antecedentes, está casado y con nietos, es jubilado desde 2014 y está próximo a la edad de 70 años», además de que no cuenta con bienes en el extranjero.
Siguen siendo ‘inocentes’ En su rechazo a los argumentos de la acusación popular contra Blesa —pedían prisión por su «posición social y dados sus contactos»—, la Audiencia Nacional les reprochaba «no abundar en cuáles son esos contactos» ni en aclarar su estatus social.