AUDIENCIA NACIONAL
El presidente de Forum Filatélico alega que no tenía experiencia financiera
El juicio por la presunta estafa de los sellos comienza 11 años después de que estallase el escándalo
Francisco Briones, presidente de Forum Filatélico entre el 2001 y la intervención judicial de la sociedad en el 2006 por estafar supuestamente 3.707 millones de euros a unos 270.000 inversores, ha negado este lunes que la actividad de la firma constituyera una estafa, además de alegar como eximente de responsabilidad que su formación profesional era comercial y no financiera o empresarial. Así lo ha declarado durante su declaración en el juicio que ha arrancado en la Audiencia Nacional, 11 años después de que estallase el escándalo.
Briones está acusado de estafa continuada, de insolvencia punible, falseamiento de cuentas y blanqueo, por lo que la Fiscalía solicita para él 27 años de cárcel. También están acusadas otras 28 personas, con peticiones de prisión que superan los 180 años de cárcel. Uno de los acusados, Jean Gaston Bernard Renard, está en paradero desconocido. Otro, Antonio Málaga Sánchez, falleció a comienzos de agosto.
A preguntas del fiscal Juan Pavía, el acusado ha admitido que puso a nombre de su esposa y dos hijos menores sus sociedades patrimoniales, en las que atesoraba activos por valor en 8,6 millones y que usaba para facturar servicios de asesoría al propio Forum Filatélico, en el 2007, ya tras la intervención. No obstante, ha negado que buscara con ello ocultar su dinero y ha asegurado que buscaba "salvaguardar los intereses de su familia", ya que temía fallecer repentinamente.
Sociedad en Belice
También ha defendido que la sociedad que tenía en el paraíso fiscal de Belice no suponía una irregularidad ya que «en todo momento fue transparente para la Hacienda española». La Fiscalía, sin embargo, ha destacado que la documentación de la firma estaba en Ginebra, en una caja de seguridad del banco UBS.
Briones ha relatado que la firma le contrató cuando tenía 21 años, en 1979, después de que su hermano le convenciese de dejar la carrera militar, en la que había alcanzado el rango de cabo. Ha asegurado que en la práctica comenzó como "como un chico de los recados". Hasta entonces, su única relación con los sellos consistía en "coleccionarlos y acudir los domingos a la Plaza Mayor de Madrid". Posteriormente fue nombrado consejero (1992), vicepresidente (1996) y presidente (2001), cuando su antecesor, Jesús Fernández Prada, fue vinculado en la prensa con el tráfico de armas.
El Estado se lava las manos
Un centenar de afectados por la presunta estafa se han concentrado a las puertas de la Audiencia Nacional antes del comienzo del juicio, para increpar a los acusados, al grito de "nuestro dinero lo tienen los banqueros" y "el Tesoro nos robó". Muchos de ellos portaban pancartas con la palabra "justicia". Los perjudicados, organizados por la asociación de consumidores Adicae, han reclamado un acuerdo político para recuperar su dinero.
Por su parte, el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha recordado el Estado no tiene responsabilidad subsidiaria en la estafa, como decidió la Audiencia Nacional. En declaraciones a la 'Cope', ha destacado que no se trataba de productos financieros, por lo que no estaban bajo la supervisión ni de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ni del Banco de España. "Eran productos físicos en los que se pedía una rentabilidad, pero no financieros en el sentido tradicional del término", ha argumentado.