Fomento contratará a un centenar de controladores aéreos el próximo año
Enaire mantiene abierta la convocatoria de 130 plazas hasta el. 24 de noviembre.
Lucía Palacios | Madrid
El buen momento que está viviendo el sector del transporte aéreo deja también su huella en el empleo. El próximo año habrá un centenar más de controladores aéreos que velarán por la seguridad del espacio. El gestor de navegación aérea de España, Enaire, dependiente del Ministerio de Fomento, incorporará a su plantilla 107 nuevos controladores aéreos hasta agosto de 2018 en el marco de su plan estratégico (Plan de Vuelo 2020), tal y como anunció ayer domingo el organismo en un comunicado.
En realidad, este incremento de plantilla no se trata de algo nuevo, puesto que estos 107 controladores provienen de las 236 plazas aprobadas entre 2015 y 2017, pero ahora se les ha puesto fecha de incorporación. A lo largo de los ocho primeros meses de 2018 setenta de ellos estarán plenamente operativos en las torres o centros de control donde hayan sido destinados, a los que se sumarán antes de que termine el año los 37 restantes. De esta forma, se espera que la plantilla se rejuvenezca, puesto que desde 2010 la edad media ha aumentado de los 45 a los 50 años e incluso casi uno de cada cinco trabajadores supera los 60.
Para aquellos que estén interesados, Enaire recuerda que hasta el 24 de noviembre está abierta la convocatoria para optar a 130 plazas de controlador. Se trata de la segunda oferta después de que el año pasado salieran 106 puestos. Así, en los dos últimos años se habrán convocado 236 plazas.
Enaire contaba a final de 2016 con 1.968 controladores aéreos, después de una década durante la cual no ha crecido ni se ha renovado. Por eso, una de las reivindicaciones de los sindicatos de este sector es el aumento de trabajadores y solicitan 250 nuevos puestos, así como un incremento salarial del 8% que ponga fin a la pérdida de poder adquisitivo que han sufrido en los últimos años, algo que todavía continúan negociando con el Ministerio, aunque a finales de septiembre cerraron un preacuerdo con el que se cancelaron las huelgas que tenían previstas para este otoño.