La Ocde reclama al Gobierno español que aumente la tributación del diésel
Cree que este combustible más contaminante debe equipararse al gravamen de la gasolina.
d. v. | madrid
La fiscalidad medioambiental es una de las asignaturas pendientes de España, cuyos ingresos se encuentran medio punto por debajo de la media comunitaria. Por ese motivo la Ocde recomendó este miércoles a España incrementar estos impuestos, especialmente, la tributación del diésel por ser más contaminante que la gasolina. «El uso de diésel, que representa cerca del 80% de las emisiones totales de carbono en carretera, se grava a una tasa efectiva más baja que la gasolina», recuerda el organismo en el informe ‘Fiscalidad sobre la Energía 2018’, publicado este miércoles.
Así, la Ocde aboga por elevar la presión fiscal sobre el litro de diésel en España, que tiene un gravamen inferior a la gasolina. En un informe anterior, el organismo que dirige Angel Gurría estimó que si se equiparase la tributación de ambos se podrían lograr 4.000 millones adicionales de recaudación. Además, serviría para desincentivar este tipo de combustible más contaminante. En cualquier caso, esta situación de mayor privilegio fiscal para el diésel no es única de España, ya que se repite en casi todos los países, según denuncia la institución. Además, la Ocde también señaló que los biocombustibles se gravan con las mismas tasas legales que sus equivalentes de combustibles fósiles en España. La Ocde siempre ha criticado la «infrautilización» de la fiscalidad verde en España. Unos ingresos que en términos reales han caído desde 2000. Sin embargo, en este documento el organismo denuncia que la mayor parte de los países desarrollados tienen margen para elevar estos tributos como fórmula para luchar contra el cambio climático. Por ejemplo, señala que los impuestos sobre el carbón son bajos o «casi inexistentes» en estos países.
Por otra parte, el barril de petróleo Brent para entrega en abril cerró ayer en el mercado de futuros de Londres en 64,37 dólares, un 2,16 % más que al cierre de la sesión anterior. El crudo del mar del Norte, de referencia en Europa, terminó la jornada en el International Exchange Futures con un incremento de 1,64 dólares respecto a la última negociación, cuando acabó en 62,72 dólares.