Las ‘kellys’ tendrán reconocidas al fin enfermedades profesionales
Trabajo acepta las patologías causadas por movimientos repetidos en brazos y manos.
J.M.C. | MADRID
La Mesa del Empleo de Calidad en la Hostelería ha aceptado el reconocimiento como enfermedades profesionales de las camareras de piso —las conocidas popularmente como ‘kellys’— aquellas «relacionadas con determinados movimientos repetitivos en brazos y manos propios de su trabajo».
El acuerdo, al que ha llegado el Ministerio de Trabajo con los agentes sociales y las comunidades autónomas, supondrá la emisión de una resolución «para que las mutuas apliquen el reconocimiento de manera inmediata».
Esta resolución se emite con el fin de que «el acuerdo se implante cuanto antes», en espera de que se modifique el Real Decreto 1299/2006, que aprueba el cuadro de enfermedades profesionales en el Sistema de Seguridad Social, según ha informado el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social. Además, el departamento que dirige Magdalena Valerio ha indicado que la Mesa «valorará la inclusión de una lista complementaria de enfermedades» padecidas por trabajadores del sector «y sobre las que se sospecha un origen profesional, como las dorso-lumbares, cervicales, hernias y otros».
Prevención de riesgos
También han declarado que el reconocimiento de las enfermedades profesionales para las camareras de piso «da respuesta a una demanda histórica de este colectivo» de trabajadoras. En cuanto a la formación laboral, se ha acordado constituir un Grupo de Trabajo que analice y proponga medidas dirigidas a la «cualificación y recualificación profesional» de los trabajadores del sector y su «formación en materia preventiva». En materia de prevención de riesgos laborales, «se ha planteado la necesidad» de «elaborar una guía práctica para evaluar los riesgos laborales» en el sector de la hostelería, «que atiende de forma singular a riesgos ergonómicos y psicosociales (cargas físicas y mentales)», según el acuerdo al que han llegado.
Las Kellys refuerzan su ofensiva: «El reconocimiento de las enfermedades profesionales es un primer paso». Los diferentes colectivos se felicitan tras conseguir una de sus reivindicaciones históricas, aunque exigen al Gobierno avanzar en otras materias, como la subcontratación