La empresa familiar se muestra pesimista con la situación económica
La confianza en la evolución es alta y el 67% asegura que reinvertirá los beneficios en la compañía.
edurne martínez | valencia
La nueva política económica del Gobierno de Sánchez no convence a los empresarios españoles. Según la encuesta interactiva realizada este lunes en el XXI Congreso Nacional de la Empresa Familiar que se celebra en Valencia ante más de 600 empresarios, los profesionales aprueban la situación económica de España pero con una puntuación de un 5,48 sobre nueve, casi un punto por debajo del 6,22 que le dieron el año pasado.
Esta percepción está en la línea de los datos macroeconómicos que facilitó el Gobierno hace unas semanas. Aunque el crecimiento de España estará en el 2,6% este año, se ralentiza respecto al año pasado, cuando rondaba el 3%. Eso sí, la confianza en la evolución económica sigue siendo alta entre los empresarios pertenecientes a este colectivo y el 67% asegura que reinvertirá los beneficios en la compañía antes que en el reparto de dividendos o en disminuir su deuda.
Respecto al empleo, casi la totalidad de los empresarios creen que mantendrán o aumentarán la plantilla el año que viene. Un 7% prevé que la reducirá, tres puntos menos que el año pasado. Sin embargo, opinan que los principales riesgos que podrían lastrar la economía española en los próximos años son el endeudamiento público y la política fiscal; la falta de reformas estructurales; los retos digitales; y el entorno económico internacional.
En la inauguración del congreso, el rey Felipe VI reconoció el valor de las empresas familiares, que suponen en términos económicos el 90% de las compañías en España y más del 60% del empleo privado. «Pero más que por los datos, son más relevantes por los valores. En una sociedad digital, donde la transparencia es uno de los elementos que definen el mundo en el que nos movemos, las instituciones, las personas y las empresas debemos entender que las decisiones de vida, de consumo, de ocio, laborales, etc. deben estar determinadas siempre por los mejores valores», destacó.
Por su parte, la ministra de Economía Nadia Calviño, aseguró ayer en Londres que el Gobierno no tiene la intención de cambiar toda la legislación laboral, sino que solo hará «algunos ajustes». Incluso llegó a reconocer que «una parte» de la reforma laboral del PP -tan criticada por el PSOE en la oposición- ha tenido «resultados positivos» porque ha dado «mayor flexibilidad al mercado laboral». Eso sí, también dejó claros los efectos negativos de la ley, sobre todo por el aumento de la «precariedad» de los contratos.