Tesla nombra a Robyn Denholm como relevo de Musk en la presidencia

Pese a las especulaciones que colocaban a James Murdoch como favorito para ocupar la presidencia de Tesla, puesto que Elon Musk tuvo que dejar por obligación para que la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos (SEC) no lo demandara por su tuit anunciando la privatizació de la marca, al final será Robyn Denholm la sucesora del sudafricano en el cargo. 

Tesla debía elegir a alguien independiente para ocupar el cargo y por eso Denholm deja su puesto como jefa de estrategía de Telstra Corp., una compañía telefónica australiana. Además, también abandonará su puesto de CFO (directora financiera) de Tesla para asumir la presidencia de la firma califroniana inmediatamente.

UNA DECISIÓN CONTINUISTA

Este nombramiento termina con semanas de incertidumbre acerca del sucesor de Musk en un puesto clave dentro de Tesla. Musk, que fue presidente desde 2004, seguirá como CEO y como director del consejo de la marca. Pese a que Denholm cumple las exigencias del SEC y será una presidenta independiente, no es nueva en la firma de coches, ya que ha sido parte del equipo de Elon desde hace varios años. De hecho, la recién nombrada presidenta ocupaba un cargo en el consejo de la marca desde 2014. "Me gustaría agradecer a Robyn que se haya unido al equipo. Gran respeto. Muchas ganas de trabajar juntos", afirmó Musk en Twitter tras el nombramiento.

El reto de Denholm será mantener la línea marcada el mes pasado cuando la marca presentó beneficios por primera vez en dos años. De este modo, la nueva presidenta deberá intentar que la firma estadounidense siga siendo sostenible y conseguir un impulso en el valor de la empresa en bolsa. "Robyn tiene experiencia en la industria automovilística y tecnológica y ha hecho grandes contribuciones como miembro del consejo de Tesla durante los últimos cuatro años ayudándonos a ser una compañía rentable", afirmó el mismo Musk en un comunicado. Antes que en Tesla, Denholm trabajó en Toyota, Sun Microsystems Inc y en Juniper Networks Inc.

La llegada de Denholm a la presidencia de Tesla cierra un capítulo de turbulencias iniciado el pasado agosto con el tuit en el que Musk anunció la privatización de la empresa. Tras no concretarse, el SEC demandó al sudafricano, que, para evitar males mayores, negoció un acuerdo en el que se comprometía a pagar 20 millones de dólares (17,6 millones de euros) y a abandonar la presidencia, que no el puesto de CEO, de la empresa. Tesla también debía pagar 20 millones de dólares como parte del acuerdo.

La decisión fue desvelada con los mercados cerrados y fuera de las 'after hours' y hasta su apertura no se pudo conocer la incidencia de su nombramiento en la bolsa. Tesla cerró el miércoles con un precio por acción de 348,16 dólares, un incremento del 2,08% respecto al cierre del día anterior. Este jueves, tras conocerse el nombramiento, las acciones de la firma californiana arrancaban al alza. Apenas media hora después de la apertura de la bolsa de Nueva York, su valor ya era 1,52% más elevado que al cierre del día anterior con una cotización de 353,46 dólares por acción, su valor más alto desde el pasado 12 de agosto cuado ascendía a 356,41 dólares por acción. Durante el día, sin embargo, su valor se fue estabilizando y el mercado cerró con Tesla cotizando 351,40 dólares por acción, solo un 0,93% más que al cierre del miércoles.