NUEVA BURBUJA
La inestabilidad internacional aviva la cotización del bitcóin
La cotización se ha disparado el 35% en una semana y el 57% en un año
Vista del gramo de oro que regalaba Novem Gold, una compañía con sede en Liechtenstein que comercia con el metal dorado, a las mil primeras personas que se pasasen por su puesto en la feria Consensus sobre criptomonedas, esta semana en Nueva York.
El bitcóin ha duplicado su precio este año. Tras superar la barrera psicológica de los 8.000 dólares el activo especulativo de moda parece reforzar su papel como valor refugio en momentos de incertidumbres y tensiones internacionales en la economía real. El oro, esa materia prima preciosa que aprecia el inversor más temeroso, también ha registrado subidas en los últimos tiempos, del 10% respecto del verano pasado. Especuladores y ahorradores buscan alternativas.
Los aranceles que el presidente Trump ha impuesto a China y las tensiones con Irán son incentivo para las criptomonedas y para activos refugio. "Aunque es difícil apuntar a la causa clara del último repunte del bitcóin, no iríamos mal encaminados si afirmamos que muchos inversores, sobre todo en Asia, han decidido apostar por la criptomoneda para protegerse de la volatilidad política que ha generado la tensión comercial entre Washington y Pekín. Y es que el bitcóin es, además, una buena cobertura para salvaguardar el capital y diversificar cartera, dejando más de lado al renminbi, que está cotizando en mínimos históricos frente al dólar", opina Jesse Cohen, analista senior de Investing.
Pero quizá no es la única razón para el crecimiento de bitcóin. También se ha producido una apuesta inversora por parte de financieras que están calentando el valor a la búsqueda de rentabilidad. Firmas como Fidelity se preparan para un servicio de compra-venta de bitcoines para sus clientes institucionales. TD Ameritrade también se metió en la venta de futuros en el mercado bitcóin en diciembre, igual que ETrade. El bitcóin ha pasado de los 3.500 dólares a más de 8.000 desde principios de año, el 35% de subida en una semana, el 57% en un mes. Un ritmo tan acelerado que no pasa desapercibido.
Como pronosticaban los expertos hace años, la marea de las criptomonedas parece ganar cordura y se concentra. Al contrario que en la anterior etapa de burbuja, el tirón de bitcóin se circunscribe especialmente en torno a esa moneda virtual. La euforia en el lanzamiento de criptomonedas ya se ha frenado como fórmula para financiar proyectos. La mácula que mancha las criptomonedas como herramienta de ocultación de patrimonios y actividades ilícitas no frenará su desarrollo, aunque puede que restrinja los canales de compraventa. El fenómeno ICO que hizo que surgieran diversas criptodivisas alternativas para financiar proyectos -con una ratio de éxito muy discutible-, parece estar en declive.
Los anuncios de algunas de las empresas más grandes del mundo en criptomonedas, reunidas esta semana en Nueva York, podrían estar impulsando el precio de bitcóin al alza. "Si las instituciones comienzan a inyectar dinero en serio en el mercado, podríamos estar al comienzo de un buen periodo para las criptomonedas", reconoció a Efe el analista de la plataforma de inversión eToro, Simon Peters.
El bitcóin tiende a revalorizarse por su propia naturaleza finita y falta de liquidez creciente ante subidas súbitas de cotizacion. Hace unos días el cofundador del banco de criptodivisas Galaxy Investment Partner y defensor del papel del bitcóin, Michael Novogratz, animaba al mercado tras pronosticar que esta criptomoneda multiplicará por tres su valor en el 2021 y superará los 20.000 dólares (17.803 euros). Las ferias y encuentros internacionales se suceden en torno a la tecnología blockchain y bitcóin. Consensus, la mayor feria dedicada a estas divisas y a la tecnología de cadena de bloques en el mundo se está celebrando en Nueva York. El próximo 20 de mayo se organiza otra feria en Dinamarca de la mano de European Blockchain Convention. La burbuja vuelve a inflarse, pero con nuevos fundamentos.