Cerrar

Los ‘riders’ de Deliveroo afirman que «somos asalariados no reconocidos»

La empresa insiste durante el juicio que sus repartidores son falsos autónomos.

Vista general de la sala donde se celebra el juicio contra Deliveroo. JUAN CARLOS HIDALGO

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

lucía palacios | madrid

«Somos falsos autónomos», repetían una y otra vez los ‘riders’ que ayer acudieron a la celebración de un juicio que muchos calificaron de «histórico». Y no les falta razón puesto que la sentencia afectará directamente al modelo de relaciones laborales impuesto por las plataformas de la economía colaborativa en su conjunto, lo que puede tener una gran repercusión en un modelo de trabajo que está en plena transformación.

Es la vista que ayer tuvo lugar en el juzgado de lo Social número 29 de Madrid y que enfrenta de forma directa a la Administración contra Deliveroo a raíz de una denuncia interpuesta por la Inspección de Trabajo. Por eso, por tratarse de una demanda de la propia Tesorería que no afecta a un trabajador en concreto sino al medio millar que prestan sus servicios en la capital tiene mayor repercusión que otros que también se han celebrado contra la compañía británica, en su mayor parte con resultados adversos para ella.

Lo que tiene que dirimir ahora el juez es si los más de 500 repartidores que operan en Madrid son autónomos que prestan sus servicios a una empresa, en este caso Deliveroo, o deberían ser asalariados -tal y como considera la inspección-, lo que supondría la modificación de las relaciones laborales de unos 4.000 trabajadores de Deliveroo, además de empleados de otras plataformas.

«Somos falsos autónomos porque no existe esa libertad ni esa flexibilidad», aseguró el miembro de la asociación Riders x Derechos Martino Corregiari, quien puntualizó que Deliveroo funciona mediante un algoritmo que, a través de un ‘ranking’ elaborado en base a una evaluación interna, te da acceso o no a una serie de horas y a pedidos. Su compañero Felipe Díaz lo corroboró: «La flexibilidad de la que hablan es un discurso para que no paguen la seguridad social».

No se trata de un tema baladí pues solo en este juicio están en juego en torno a 1,2 millones, la cantidad que la Tesorería estima que Deliveroo, que se vería obligada a darles de alta en la Seguridad Social, debería pagar en concepto de las cotizaciones no abonadas a ese medio millar de trabajadores.

Deliveroo lo niega. «Los repartidores son autónomos porque ellos lo quieren, así tienen el control y pueden elegir cuánto trabajan, dónde, cómo y con quién lo hacen», argumentó la directora de Comunicación d, Carolina Pérez, que hizo hincapié en que si el juez ordena su reclasificación como empleados «perderían estos beneficios». Y para corroborarlo, presentaron como testigos a un grupo de riders que manifiesta que quieren seguir siendo autónomos. Pero van incluso más allá. La compañía británica negó que sus repartidores sufran condiciones precarias y aseguró que algunos de ellos, en torno a unos 40, facturan hasta 100.000 euros, si suman también los ingresos que obtienen de Glovo.

Cargando contenidos...