El Estado rescatará empresas estratégicas de salud, infraestructuras y comunicaciones
Activa el fondo de 10.000 millones que se adentrará en negocios en dificultades pero solventes, y otro del ICO por 40.000 millones
La crisis del coronavirus también derivará en rescate público de empresas , como ocurrió con la recesión de hace una década, aunque en esta ocasión con muchos matices. El Estado auxiliará a compañías afectadas por este entorno económico tan desfavorable como imprevisto: lo hará adentrándose directa o indirectamente en su capital. Esa fue una de las medidas que este viernes salieron de la reunión extraordinaria del Consejo de Ministros, donde se puso en marcha un plan millonario para lograr la "reactivación" de la economía y evitar su hundimiento tras el confinamiento, según señalaba el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, en una solemne presentación del programa.
La herramienta de rescate público será el nuevo Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas, un instrumento que estará dotado con 10.000 millones de euros y cuyo objetivo es aportar apoyo "temporal" -primer matiz- para reforzar la solvencia de empresas afectadas por la pandemia. Otra diferencia con respecto a la crisis anterior: no supondrá un respaldo al sector bancario, cuyas entidades quedan excluidas de la medida. La nacionalización llegaría si el porcentaje de participación del Estado es determinante en la toma de decisiones de la empresa, como ocurre en Bankia desde 2013.
Lo que sí hará el Estado será adentrarse en el accionariado de estos grupos estratégicos. Lo hará a través de la Sepi (la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales) a través de préstamos participativos, la adquisición de deuda subordinada o la suscripción de acciones u otros instrumentos de capital. Es decir, no se trata de subvenciones, sino de participaciones societarias a través de diferentes fórmulas. El presidente del Gobierno defendía que la finalidad del fondo es garantizar la continuidad y solvencia de empresas que atraviesan severas dificultades por el Covid-19, pero son "perfectamente viables y solventes y constituyen el corazón del tejido productivo". Y apuntaba varios sectores en los que el Estado podría participar: la seguridad, la salud de las personas, las infraestructuras, las comunicaciones o su contribución al buen funcionamiento de los mercados.
Paso atrás en dividendos
La medida iba a implicar también una importante condicionalidad, la prohibición de repartir dividendos si eran auxiliadas por el Estado. Así lo contenía la iniciativa del PSOE en la Comisión para la Reconstrucción del Congreso. Pero este viernes a última hora, el grupo socialista, tras pactar con Ciudadanos, eliminaba de las conclusiones esa exigencia que dos días antes había apoyado.
En cualquier caso, el importe de los dividendos, intereses y plusvalías que resulten de las inversiones que realice el Estado se ingresarán en el Tesoro.
Tres meses y medio después de decretar el confinamiento, el Gobierno ha vuelto a poner sobre la mesa otro programa millonario para que la actividad "vuelva al crecimiento y a la recuperación" tras la pandemia, según ha indicado Pedro Sánchez. Por ello, el Ejecutivo ha puesto sobre la mesa la creación de una nueva Línea de Avales del Instituto de Crédito Oficial (ICO) por 40.000 millones de euros. Va dirigida a impulsar la actividad inversora y fomentarla en las áreas donde se genere mayor valor añadido, en torno a dos ejes principales: la sostenibilidad medioambiental y la digitalización. Esta nueva línea del ICO llega después de la de los 100.000 millones avalados para dotar de liquidez a las empresas.
Además, ha aprobado los 'Planes de Sostenibilidad Turística en Destinos' para impulsar el desarrollo de los destinos turísticos ubicados en áreas rurales y de interior . También ha aprobado una moratoria hipotecaria para inmuebles afectos a la actividad turística, a través del otorgamiento de un periodo de moratoria de hasta 12 meses para las operaciones financieras de carácter hipotecario suscritas con entidades de crédito.