«Somos una gran empresa del Bierzo y nuestra intención es seguir siéndolo en el futuro»

La entrevista tiene lugar por videoconrencia. Rafael González conoce bien el Bierzo. Aunque ha tenido destinos por medio mundo, le tira la tierra, y espera poder pasar unos días pronto en su pueblo. En la provincia de León.

— ¿Qué le ha costado, en términos de producción eléctrica, el cierre de Compostilla a Endesa? ¿Y qué ha supuesto para Endesa el fin de la producción con carbón en sus centrales térmicas de la comarca?

— «Para nosotros, es el origen de Endesa. Supone mucho, ha sido una central emblemática, fundamental en nuestra generación de energía. Ha tenido diferentes etapas. Una producción importante, significativa, hasta 2015, cuando empezó a reducirse, y ya en 2019 y 2020 no hemos producido nada. En los buenos años, por poner la central en perspectiva, Compostilla generaba el equivalente al consumo de un millón de familias. A finales de 2018, por competitividad y porque la central no era viable económica ni ambientalmente, solicitamos el cierre. Endesa está en transición hacia un modelo de generación sostenible y el año pasado construimos casi el equivalente, en potencia, a una central de Compostilla, y ese es nuestro objetivo para los próximos años, construir proyectos de energías renovables que sustituyan a la energía que producimos en las centrales de carbón».

— Después de la visita al Bierzo de la directora del Instituto para la Transición Justa a la comarca, ¿ha quedado más claro el papel que quiere tener Endesa en la reindustrialización del Bierzo?

— «El papel de Endesa lo tenemos claro. Nacimos en el Bierzo, seguimos en el Bierzo, porque tenemos una actividad importante en el Bierzo, y seguiremos en el Bierzo con nuestros proyectos. Y hemos tenido claro el papel que nosotros jugamos en este momento de transición, en el que se necesita una reactivación económica. Somos una gran empresa en el Bierzo y nuestra intención es seguir siéndolo. Siendo un elemento tractor de inversiones y actividad económica y dinamizador del desarrollo social y económico de la comarca. Cuando presentamos la solicitud de cierre lo hicimos con un plan de acompañamiento y de futuro, que básicamente consiste en aprovechar el emplazamiento para nuevas inversiones y desarrollar proyectos de renovables en el entorno».

— ¿Qué proyectos propios va a llevar a cabo Endesa en la comarca del Bierzo?

— «Nosotros tenemos en el Bierzo una presencia importante. Gestionamos toda la producción hidroeléctrica del Noroeste, que son 800 megawatios en treinta plantas y hay 70 personas trabajando. Con respecto a la pregunta, lanzamos hace más de un año todo este proyecto para atraer inversores con la participación también de las administraciones públicas, con el Ministerio, con la administración autonómica, con los ayuntamientos afectados... Los proyectos tienen diferente tipología, no son energéticos. Nosotros somos una empresa energética y nuestro interés es participar en los que sean de nuestro negocio. Hay alguno que tiene algún componente energético y que sí estamos abiertos con estos socios inversores. Al margen, tenemos una serie de proyectos renovables, no exactamente en el emplazamiento de Compostilla, porque se da la circunstancia de que, en Cubillos, el recurso de renovables no es muy bueno. No hay muchas horas de sol ni de viento en el emplazamiento de la central, pero sí en un radio de 75 kilómetros sí hemos identificado proyectos de futuro por 700 megawatios (250 en el propio Bierzo), con una inversión estimada de 600 millones de euros. Y lo haremos en los próximos cinco años».

— ¿Qué nivel de empleo puede generar en el Bierzo tanto los proyectos de Endesa como los que salgan de ese concurso en el que se han seleccionado, en principio, ocho proyectos?

— «Es una prioridad para nosotros. En los proyectos que irán en Compostilla, que ahora están en fase de evaluación, tengo que decir que hemos visto mucho interés comparado con lo que ha ocurrido en otros países. Propuestas diversas y de calidad. Tenemos desde propuestas de decenas de puestos de trabajo hasta de cientos. Lo que hemos de hacer ahora es darles solidez. Por lo que se refiere a nuestros proyectos de renovables, consideramos que se pueden generar mil empleos anuales en la fase de construcción, estimada en tres años. Además está el propio desmantelamiento de la central. Ya tenemos personal ocupado en desmantelar los grupos más antiguos, y que va a trabajar en los grupos más modernos. Estimamos que será una media de 140 empleos durante un periodo de cuatro años».

— ¿En qué condiciones va a ceder Endesa los terrenos de Compostilla? ¿Será gratis, como le piden algunos políticos, dado que en su día fueron terrenos cedidos a Endesa para la central?

— «Nosotros creemos que estos terrenos tienen un valor importante para el desarrollo futuro de todas estas iniciativas, y más que el precio lo que importa es su valor. Son más de 300 hectáreas que ocupa la central, terrenos rústicos, vertederos… Aquí, lo que facilitaremos es que los proyectos se implanten y se desarrollen. Con cada una de las propuestas, caso a caso, estudiaremos las necesidades, las características…y llegaremos a un acuerdo. No sólo sobre los terrenos; porque alguno de los promotores ha solicitado la utilización de equipos que tenemos en la central. Nosotros estamos totalmente abiertos y disponibles para que alguno de los equipos también pueda ser utilizado».

— ¿Y qué le pide Endesa al Ministerio para la Transición, en concreto en la comarca?

— «Con el Ministerio y con las administraciones públicas autonómicas, locales… estamos trabajando muy de la mano. Este es un proyecto de futuro para construir entre todos. Firmamos el convenio de transición justa con las administraciones, con los sindicatos... Los fondos de reactivación deben ponerse en valor para facilitar todos estos proyectos».

— Puede darme alguna pista sobre esos ocho proyectos que han pasado el corte.

— «Somos optimistas. Son sólidos, de calidad y muy diversos. Tenemos proyectos de transformación agroalimentaria de productos del Bierzo, propuestos también por empresas locales que ya tienen historia; tenemos de manufactura, industriales que también pueden tener cabida, y proyectos de servicios transformadores del entorno, de los que no puedo dar más detalles porque estamos sujetos a acuerdos de confidencialidad y que crearían gran cantidad de empleo del sector servicios. También los hay de nuevas tecnologías, energéticos… Es decir, una diversidad que no hemos tenido en otros sitios. De aquí ha de salir algo con futuro. Esperamos que en septiembre, octubre, podamos ya darlas a conocer.