La economía española crece un 2%, lo previsto para el segundo trimestre

El Producto Interior Bruto creció cuatro décimas en el segundo trimestre respecto al primero, cuando ese avance había sido de cinco décimas entre enero y marzo. Por otra parte, va a ser necesario un aumento de casi medio punto porcentual en el segundo semestre para cumplir el objetivo del Gobierno. Tras dos correcciones a la baja, ahora se ha previsto un incremento del Producto Interior Bruto del 2,2 % para este año, en todo caso la tasa más reducida desde 1994. Por cierto que el INE ha corregido a la baja una décima el crecimiento anual de 2001, para dejarlo en el 2,7 %. No sucede lo mismo en el caso del empleo, que en el segundo trimestre creció a un ritmo del 1,4 %, lo que permitió la creación neta de 224.000 puestos a tiempo completo, frente a la previsión corregida a la baja por el Ejecutivo, que ahora contempla un avance del 1,1 % para el conjunto del año. La actividad mantuvo en el segundo trimestre un ritmo de aumento del 2 % -el mismo que anticipó el Banco de España, y del que el propio ministerio de Economía se hizo eco por anticipado-, con menor expansión del gasto de los hogares, compensada por un repunte de la inversión en construcción y una mejora relativa de la inversión en equipamiento, con menor deterioro del saldo del comercio de bienes y servicios. Los hogares gastaron un 1,7 % más en comparación anual, lo que supone seis décimas menos que en el trimestre anterior, y todo apunta a una reducción del consumo de alimentos y bienes duraderos. Este dato queda matizado con respecto al trimestre anterior, ya que se registró un 0,3 % de aumento en los dos casos. Esto quiere decir que las familias comenzaron a apretarse el cinturón a principios de año. El consumo de las Administraciones Públicas, que pierde fuelle respecto al segundo trimestre de 2001, aumenta cuatro décimas con relación a enero-marzo. En el comportamiento de la inversión, el único dato claro es el repunte de la construcción, que muestra un avance anual del 4,6 % (dos décimas superior al del primer trimestre) y también crece cuatro décimas cuando se compara directamente con los primeros meses del año. En la inversión en bienes de equipo no se puede hablar de una mejora neta. Entre abril y junio cayó un 4,4 % respecto a igual periodo de 2001, seis décimas menos que en el primer trimestre, pero ocurre que el segundo trimestre de este año ya se compara con un pésimo dato del ejercicio anterior. La evolución trimestral resulta significativa: frente al avance del 0,4 % entre enero y marzo, se produjo un retroceso del 0,2 % entre abril y junio. El sector exterior, que experimenta una fuerte desaceleración respecto a los ritmos previstos para este año, ha contribuido con cuatro décimas al crecimiento del PIB en el segundo trimestre gracias a un efecto estadístico. Es el reflejo de la menor caída de las ventas al exterior y de la sensible reducción de las compras en el extranjero. Las exportaciones realizadas entre abril y junio fueron inferiores en un 1,4 % a las de igual periodo del año anterior, lo que supone una mejora de nueve décimas respecto al dato del primer trimestre. Las importaciones, que restan valor al PIB, han pasado de un retroceso del 1,8 % en los primeros meses del año a una caída del 2,5 % en el segundo trimestre. En la actividad de las diferentes ramas destaca el tirón de la construcción, que ha aumentado a un ritmo anual del 4,8 %.