Fidalgo y Méndez ultiman la protesta de mañana y aseguran que la reforma no acarrea ni vencedores ni vencidos
Cuevas: «Los empresarios no quieren cambiar el coste del despido»
El presidente de CEOE, José María Cuevas, ve «bastante difícil» un acuerdo entre Gobierno y sindicatos para cambiar la reforma laboral,
Cuevas, en el centro, junto a J. Oliver y G. Barceló, en el momento en que habló sobre el decretazo
Las declaraciones de Cuevas tuvieron lugar en Palma de Mallorca, donde presidió la asamblea de los empresarios de Baleares. Y, las manifestaciones de Fidalgo y Méndez se produjeron ante las cámaras de Telemadrid y los micrófonos de Onda Cero. Fuentes del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales informaron que el pasado martes, el titular del Departamento, Eduardo Zaplana, también telefoneó a Cuevas para convocarle a la reunión del día 7, en la que el Gobierno aclarará a los agentes sociales los cambios que piensa introducir en la reforma laboral. Dificultades Cuevas resaltó que la dificultad para el entendimiento entre Gobierno, CC.OO. y UGT radica en las actitudes «intransigentes» de los sindicatos. «Me da la impresión de que no existe relación entre ellos», comentó, al tiempo que solicitó al Ejecutivo que «diga algo a los miles de empresarios y trabajadores que vieron pisoteados sus derechos sin ninguna razón el 20-J» (día de la huelga general contra el «decretazo»). En definitiva, Cuevas abogó por el mantenimiento de la esencia de la norma. Por ello, avisó al Gobierno, de que los empresarios no quieren que se restablezcan los salarios de tramitación salariales». Los dos sindicalistas explicaron que la llamada de Zaplana no ha alterado los planes movilizadores de CC.OO. y UGT y, en consecuencia, sus centrales ultiman los preparativos de la concentración/protesta organizada para mañana en la madrileña Puerta de Alcalá, en el centro de la ciudad. Las previsiones apuntan que llegarán a la ciudad alrededor de 1.300 autocares procedentes de diversas comunidades, con unos 70.000 trabajadores. En total, CC.OO. y UGT piensan reunir en torno a unas 300.000 personas. Portavoces de ambas centrales argumentan que la concentración reiterará las demandas de la huelga del 20-J. En su opinión, es imprescindible reiterar el amplio rechazo social que merecen los recortes del «decretazo» y «la necesidad de que sean reconsiderados en su integridad». Por otro lado, la Confederación General de Trabajo (CGT) anunció que participará en la protesta de CC.OO. y UGT para «sumar esfuerzos contra el decretazo».