La hostelería sigue agonizando
El sector tiene una facturación un 70% inferior incluso en Semana Santa Dos de cada tres hosteleros asumen que no recuperarán el nivel de actividad prepandemia hasta finales de 2022
La hostelería no levanta cabeza. Con la vista puesta en el verano, los hosteleros están viviendo un año para olvidar. En algunas comunidades por el cierre total al que se han enfrentado durante meses por las restricciones sanitarias y, en las más laxas como Madrid, por el desplome del consumo que se arrastra desde hace meses.
El sector tiene todavía una facturación un 70% inferior incluso en Semana Santa. Con estos datos en la mano, dos de cada tres hosteleros asumen que no recuperarán el nivel de actividad prepandemia hasta finales del año que viene. Ya ni 2021. Esperan al 2022. Y a finales.
Durante la Semana Santa, una época en la que normalmente el sector estaba acostumbrado a hacer caja, la caída de las ventas a nivel nacional ha alcanzado el 70% respecto a las cifras de 2019, antes de la pandemia, según los datos de Hostelería de España, la patronal que representa el sector.
El caso de Madrid es bastante mejor para los hosteleros, ya que la comunidad establece límites de aforos pero los locales pueden estar abiertos durante todo el día, hasta el toque de queda fijado a las 23:00 horas.
Sin embargo, aunque algunos vaticinaban una mejora de las cifras porque el cierre perimetral de Semana Santa ha impedido la salida de la región, la caída de la facturación también ha sido importante, de un 40% menos de ventas respecto a 2019, según las cifras de la patronal.
José Luis Yzuel, presidente de Hostelería de España, explica a este periódico que el modelo por el que ha apostado Madrid es «compatible» con el desarrollo de su actividad económica, lo que supone que sus caídas de la facturación sean menores a las de otras comunidades. Yzuel indica además que lo mismo sucede en el empleo, donde la diferencia de la caída respecto a Cataluña es de cuatro puntos.
Y es que la caída de la facturación afecta directamente al empleo.
Yzuel indica que el año pasado se perdieron 300.000 empleos en el sector respecto a los que había en 2019 y el año se cerró con 364.000 trabajadores en erte, casi la mitad del total de los que aún continúan bajo este mecanismo en España. El primer trimestre ha empeorado la situación, sobre todo en febrero con el auge de la tercera ola, superándose las 450.000 personas del sector de la hostelería acogidas a un erte. En marzo aún seguían 374.0000 empleados en esta situación.
Los datos de Randstad no dejan lugar a dudas: la contratación en la hostelería se ha desplomado un 75,4% en España desde el verano. Es decir, desde entonces —techo de la contratación tras la irrupción de la pandemia— se han dejado de firmar más de 176.000 contratos, pasando de los casi 234.000 de julio a los 57.500 actuales. En febrero llegó a marcar el peor registro de todo el año de pandemia.
El informe de Randstad revela además grandes diferencias a nivel autonómico. Con datos comparados con julio, Baleares (-93%), Galicia (-92%) y Cantabria (-88%) son las que registran las mayores caídas de la contratación hostelera. Los descensos menos pronunciados se produjeron en País Vasco (-58%), Canarias (-46%) y la Comunidad de Madrid (-31%).