El PP propone rebajar 2.900 millones la factura de la luz y el gas de quienes ahorren

Seis días después de avanzarlo durante su cara a cara con Pedro Sánchez en el Senado, Alberto Núñez Feijóo cumplió con su promesa y ayer por la tarde remitió a Moncloa su plan energético.

Feijóo desliza que el PP «ha demostrado tener capacidad de presentar iniciativas útiles al Gobierno», en referencia a la bajada del IVA de la luz y del gas, cuya paternidad se atribuye, pese a que la reducción del IVA eléctrico del 21% al 10% data de junio de 2021. «El documento que le envío pretende ahondar en este espíritu constructivo», añade Feijóo, que abre la puerta al Gobierno a «negociar». Antes de remitir el documento a Moncloa, el vicesecretario económico del PP, Juan Bravo, explicó a la prensa las medidas. Bravo contrapuso las medidas obligatorias que establece el decreto de ahorro energético promovido por Moncloa con los incentivos que los populares proponen para que hogares y pymes reduzcan su consumo de manera voluntaria.

El plan del PP recoge una escala de descuentos en la factura del gas y de la electricidad tanto de particulares como de empresas pequeñas y medianas según cuál sea el ahorro energético que efectúen a partir del mes de noviembre en comparación con las cifras de un año antes. La reducción en la factura partiría del 5% en la electricidad y del 10% en el gas si el consumo baja entre un 3% y un 6,99%; y el descuento podría alcanzar el 20% en la luz y el 40% en el gas para ahorros energéticos superiores al 15%. Si el consumo se reduce entre un 7% y un 14,99%, la rebaja de la factura sería de un 10% en la electricidad y de un 20% en el gas.

De acuerdo con los cálculos del PP, si se logran reducciones en el consumo de entre un 7% y un 15%, el ahorro total para familias y empresas podría alcanzar los 2.900 millones de euros.

El Pleno del Congreso de este martes vota la toma en consideración de la Proposición de Ley para el establecimiento de gravámenes temporales sobre energéticas y bancos. El voto del PP puede oscilar entre el no y la abstención. Juan Bravo no terminó de aclararlo. Pero sí afirmó, respecto al tributo energético, que «de entrada, sí a todas las medidas que rebajen el precio de la luz», algo que, añadió, este impuesto «no hace»; «de entrada, no», agregó, a medidas que implican que el dinero, en lugar de estar «en las casas», va a «la caja». Además, argumentó que ahora que Europa está analizando medidas, «no parece muy lógico que hoy se presente algo que está siendo objeto de debate». Respecto al impuesto sobre la banca, valoró que está en contra de que a los ciudadanos les repercutan estos nuevos tributos.