«Este país no necesita posturas radicales»
—¿En algún momento pensó que podía perder en el proceso electoral?
—Sinceramente, no. La inmensa mayoría de las organizaciones territoriales y sectoriales me habían mostrado su apoyo y empujado a presentarme para un nuevo mandato. Estaba tranquilo y confiado en que mi proyecto iba a continuar. Es más, no he hecho campaña. Mi campaña han sido los cuatro años de trabajo previos. Y la última semana la he pasado trabajando en el conflicto del transporte, porque era un tema muy serio.
—¿Y qué sensación le ha quedado?
—No sé si ha sido porque el acto se celebró en el Auditorio Nacional, pero me parece que los empresarios somos una orquesta. A mí me toca ser el director, pero tocamos todos a la vez y eso va a continuar siendo así.
No hay purga
—¿Cree que el hecho de que se hayan presentado dos candidaturas puede dejar heridas?
—No. Los empresarios somos muy serios. Desde hoy, todos a una. Y en la Ceoe están los autónomos, las empresas pequeñas, las grandes y todos los territorios, y eso da mucha fuerza. Este país no necesita posturas radicales. Insisto, ahora todos juntos, porque no nos podemos dedicar cada uno por separado a nuestros intereses particulares.
—A alguien le puede caber la sospecha de que ahora se abra un proceso de purga contra sus opositores.
—La palabra purga me parece extrema, no lo contemplo. Otra cosa es que ahora tenemos que conformar un comité cohesionado.
—¿Sánchez Llibre, el líder de los empresarios catalanes y principal impulsor de la candidatura que se oponía a su reelección, volverá a ser vicepresidente?
—Ninguno de los vicepresidentes actuales tiene garantizado que vaya a seguir o no. El comité se formará a finales de diciembre. Pero ya le aclaro que yo no soy vengativo.
—¿Sus opositores le han felicitado por el resultado?
—Me dieron la enhorabuena, sí. Estas elecciones se producen cada cuatro años y es una expresión de democracia. Hay que darle la trascendencia justa, no más.