España y Portugal solicitan a la UE la extensión de la excepción ibérica
Se muestran «optimistas» mientras Bruselas estudia ya si prorroga el mecanismo
España y Portugal ya han iniciado los contactos para extender la excepción más allá de mayo. Los dos países han solicitado formalmente la prórroga de este mecanismo, que ha permitido limitar el impacto del aumento del precio del gas en la factura eléctrica. La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, y su homólogo portugués se han mostrado «optimistas» tras la reunión mantenida con la comisaria de Competencia, Margrethe Vestager.
Lisboa y Madrid esperan lograr el visto bueno de Bruselas para mantener el tope de entre 45 y 50 euros por megavatio hora (MWh) con el que cuentan actualmente y que ha permitido abaratar la factura de hogares y empresas en 4.577 millones de euros, según cálculos del Ministerio para la Transición Ecológica. En el encuentro, a puerta cerrada, las tres partes han repasado el funcionamiento de este mecanismo y ahora la propuesta está en manos de los equipos técnicos. Aunque aún se desconoce la fecha del próximo encuentro, queda pendiente la fijación de precios y las condiciones en las que se daría esta prórroga. Por el momento, las señales que llegan desde Bruselas son «constructivas» e invitan al «optimismo».
La excepción ibérica entró en vigor en junio de 2022, después de recibir el visto bueno de los Veintisiete, que tuvieron en cuenta las particularidades de la península ibérica como isla energética. Desde entonces, España ha defendido que se trata de una iniciativa «de éxito» y otros países como Italia y Grecia la quieren imitar. Una portavoz del Ejecutivo comunitario explicó que en el encuentro de este miércoles «discutieron cuestiones dentro de la cartera de Competencia, en particular en relación al mercado energético».
En este sentido, recordó que la Comisión Europea dio a principios de junio de 2022 su visto bueno a la medida, que entonces evaluó en 8.300 millones de euros.