Casi un millón de personas no cobra en España ningún tipo de prestación
Desde 2009 crece el colectivo formado por desempleados de larga duración que han agotado las ayudas
El paro en España se está cronificando y enquistando hasta tal punto, que un millón de desempleados no cobra ningún tipo de prestación, ni contributiva ni asistencial, en su mayor parte por haber agotado ya el tiempo y haber consumido esta ayuda, aunque también puede deberse a que no cumplen los requisitos necesarios que se exigen para acceder a ella. Sea la causa que sea, se trata de un porcentaje tan elevado que supone más de un tercio de los más de 2,8 millones de parados registrados que había en España a cierre de 2022, un 35% del total, según denunció este miércoles CC OO durante la presentación del informe ‘Mercado de trabajo y protección por desempleo. Año 2022’.
Es más, el número de personas sin prestación ha aumentado de forma significativa desde 2009, a pesar de que son mayoría los que cuentan con experiencia laboral previa. Así, si hace 14 años el 17% de los parados con experiencia laboral no recibían ninguna prestación, a finales de 2019 se elevaron más de diez puntos porcentuales hasta situarse en el 29% y superar los 750.000.
«Estas personas son las que sufren los efectos de los vacíos de cobertura de las prestaciones, ante la dificultad para acceder de nuevo a un empleo o de cotizar el tiempo suficiente. Además, prestaciones como las rentas mínimas de las comunidades autónomas en su momento o el Ingreso Mínimo Vital no logran cubrir estos vacíos por los excesivos requisitos o las dificultades de acceso a las ayudas», advierte el estudio elaborado por el sindicato.
Esta falta de cobertura de un número muy significativo de los parados registrados se debe al elevado paro de larga duración que existe desde hace años en el país y que no se consigue reducir ni en los momentos de mayor bonanza económica. De hecho, en la actualidad, cuando el mercado laboral está creciendo a ritmos no vistos desde hace más de una década, aún hay 1.359.800 desempleados de larga duración, el 45% de las personas desempleadas, y un 58% no cobra prestación. Algo que no es de extrañar, puesto que casi siete de cada diez, el 67%, lleva más de dos años en desempleo e incluso más de 610.000 (el 22% del total) suman ya más de cuatro años buscando empleo sin éxito, por lo que, en caso de que hubieran tenido acceso a la prestación, ya la han agotado, puesto que las contributivas se reciben durante un máximo de 24 meses.
Las personas mayores de 45 años y en especial las mujeres son las más afectadas por estos largos períodos de desempleo, que en muchas ocasiones conducen a situaciones de paro estructural y a la exclusión social, resalta este estudio en el que se observa la peor situación de las mujeres en desempleo respecto a los hombres. Así, el 34,4% de las mujeres desempleadas con experiencia laboral no tienen acceso a las prestaciones, frente al 21,5% de los hombres, y la tasa de cobertura también es mucho menor en el caso de las mujeres y solo protege al 63%, frente al 76,75 de cobertura para los hombres.
Se trata de otra brecha de género que existe en la protección por desempleo, debido a que las carreras laborales de las mujeres son más cortas e intermitentes, y contra la que no se está actuando como sí se está haciendo en la brecha de género de las pensiones, según denunció Carlos Bravo, secretario confederal de Seguridad Social y Previsión Social Complementaria de CC OO.
La mayoría de prestaciones que se pagan son asistenciales y, por tanto, de menor cuantía. Concretamente, de los más de 1,7 millones de trabajadores que cobraron el pasado año algún tipo de prestación de los Servicios Públicos de Empleo, el 44% recibieron una contributiva y el 56% restante fueron ayudas asistenciales; la más habitual es la ayuda para mayores de 52 años (un 43% de los beneficiarios).
Desde CC OO instaron al Gobierno a aprobar esa reforma que habían prometido para ampliar la cobertura y simplificar los subsidios. Sin embargo, el sindicato se lamentó de que no han convocado a los agentes sociales y que va a ser poco ambiciosa.
La vicepresidenta primera, Nadia Calviño, reveló un día antes de tiempo el «excelente comportamiento» que está teniendo el mercado laboral español en este inicio de año. La Seguridad Social sumó en este primer cuatrimestre más de 400.000 nuevos afiliados de media en términos originales, según avanzó la ministra, que no quiso esperar a que este jueves el departamento comandado por José Luis Escrivá hiciera públicos los datos oficiales. A falta de conocer los detalles, Calviño habló de un «aumento generalizado en todos los sectores». «Estamos, en definitiva, ante un cambio estructural en nuestro mercado laboral», presumió.