Las prejubilaciones se disparan y representan casi la mitad de las altas
Decenas de miles de trabajadores adelantan su retiro para beneficiarse de la subida del 8,5% y cobrar casi 1.800 euros al mes
La reforma de las pensiones está teniendo en este inicio de año el efecto contrario al que buscaba. Las jubilaciones de trabajadores antes de tiempo, precisamente a las que se quería poner coto con la nueva norma, se han disparado en el primer trimestre de 2023 y casi representan la mitad de las nuevas altas, lo que supone un máximo en la última década.
Es más, en los dos primeros meses del año por primera vez se dio la vuelta a la tendencia que venía siendo habitual y llegó a haber incluso más trabajadores que decidieron jubilarse previamente que los que lo hicieron con la edad legal: 30.904 frente a 30.289, según los datos del Instituto Nacional de la Seguridad Social a los que ha tenido acceso este periódico. Este porcentaje superior al 50% se ha amortiguado ligeramente en el mes de marzo, pero incluso así los retiros anticipados representan a cierre del primer trimestre el 45,1% de las nuevas altas. Además, lo hacen con una pensión que por primera vez roza los 1.800 euros al mes, 421 euros más que la que reciben los que se van con la edad ordinaria (1.353 euros).
Paradójicamente la reforma diseñada por el ministro José Luis Escrivá, cuyo objetivo último es alargar la vida laboral de los trabajadores para así reconducir al sistema a la sostenibilidad, ha llevado a niveles récord a las prejubilaciones en el final del año pasado y en este inicio de 2023 pese a que se han endurecido. Pero detrás de este ‘boom’ del retiro anticipado hay una causa clara: los trabajadores han adelantado su decisión de pasar ya a ser pensionistas para poder beneficiarse de la fuerte subida que han experimentado este año las prestaciones, un histórico 8,5%.
Esto se debe a otra de las medidas que ha introducido esta reforma: revalorizar las pensiones con la inflación media de cada año, sea cual sea, para garantizar de por vida el poder adquisitivo de los mayores.
Por ello, el último mes de 2022 se produjo tal avalancha de jubilaciones, que se convirtió en el diciembre con mayor número de altas de la serie histórica. E incluso fue el tercer mes con más retiros pese a que tradicionalmente es el que menos altas registra cada año. Los trabajadores que estaban a las puertas de la jubilación, o que podían hacerlo antes de tiempo por haber cotizado el periodo necesario, se pusieron a hacer sus cálculos... y cuál fue su sorpresa al ver que, pese a que existen fuertes penalizaciones por adelantar el retiro, o prácticamente no les perjudicaba o, incluso, se daba el caso contrario de que les beneficiaba hacerlo antes de que terminara el año, al cobrar más que si lo hacían cuando les tocaba, por esa subida del 8,5%.
Así por ejemplo les sucede a los que pueden jubilarse un año antes. Por ese adelanto se les aplica un recorte en su pensión en torno al 5% (un poco más o algo menos dependiendo de los años cotizados). En cambio, si pidieron la jubilación antes de que terminara diciembre, a esa pensión luego se le aplica la revalorización del 8,5%, que compensa con creces esa reducción. Así, les sale más ventajoso hacerlo antes, puesto que cobrarían una mayor pensión (3,5 puntos porcentuales más) que si lo hacen a lo largo de este año.
Así lo reconoce el Ministerio de Seguridad Social, que admite que se ha producido un ‘efecto llamada’ que ha incentivado la jubilación para poder cobrar esa subida con la inflación. De hecho, este fuerte incremento de los retiros antes de tiempo en el primer trimestre del año, con un peso del 45% muy superior a años previos, se debe a jubilaciones solicitadas en diciembre pero que se han tramitado más tarde, puesto que existe un plazo de 90 días para poder reconocer la nueva prestación que se aplica con carácter retroactivo. Desde el ministerio consideran que en los próximos meses irá reduciéndose su peso y este año podría volver a marcarse otro mínimo, como sucedió en 2022, cuando los retiros anticipados representaron el 37% de todas las jubilaciones.
En el lado contrario, los nuevos premios que se han puesto en marcha con la reforma —con cheques que han superado incluso los 200.000 euros— han llevado a máximos la jubilación demorada y casi un 8% de los trabajadores alargó su vida laboral para poder cobrar una mayor pensión.