La OCDE advierte del riesgo de otra crisis de deuda en todo el mundo
En los tres próximos años los países más desarrollados afrontarán pagos por 21 billones
Después de dos crisis económicas casi consecutivas —la de la pandemia, con el cerrojazo a la economía, y la de la inflación por la guerra de Ucrania—, el endeudamiento de las grandes economías mundiales se ha disparado para poner en marcha los planes de ayuda que ahora hay que pagar. Así lo advierte la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico), cuyos estudios anticipan que este conjunto de economías tendrán que afrontar un vencimiento de su deuda superior a los 21 billones de euros (con ‘b’) durante «los tres próximos años».
Para hacer frente al impacto económico que tuvo la pandemia, todos los países activaron mecanismos de ayuda (social, laboral y empresarial) que sirvieron para evitar un colapso histórico. Después, con el inicio de la invasión rusa y los precios disparados, muchos de esos planes se reconviertieron a ayudas públicas para que hogares y compañías pudieran hacer frente a un incremento de precios también récord.
Pero la OCDE avisa de que este tipo de actuaciones van llegando a su fin de forma clara:»2023 marca el final de un largo período de condiciones de financiación favorables para los emisores soberanos», ha señalado el secretario general de la OCDE, Mathias Corman, subrayando que la rápida evolución del entorno se ha visto agravada por los efectos financieros y económicos de la guerra en Ucrania.
En un informe publicado este lunes, la OCDE advierte de que los costes de endeudamiento para los emisores soberanos «se han más que duplicado» desde 2021, con un encarecimiento del rendimiento medio de los bonos soberanos (el precio al que los países se comprometen a pagar a los inversores por su deuda) en el momento de la emisión desde el 1,4% en 2021 al 3,3% en 2022, y parece que aumentará aún más en el corto plazo.
Como resultado, la organización señala que los países enfrentan un riesgo elevado de refinanciamiento y muchos gobiernos gastarán una mayor proporción de sus presupuestos en el servicio de la deuda y pueden enfrentar mayores restricciones fiscales en los próximos años.
Por otro lado, la organización aclara que a pesar de que las necesidades de endeudamiento de los países de la OCDE disminuyeron en 2022, hasta situarse más de un 20% por debajo del récord de 2020 a causa de la pandemia de Covid-19, se prevé un repunte este año a consecuencia del impacto de la guerra. De este modo, las necesidades de endeudamiento bruto aumentarán alrededor de un 6% en 2023, hasta un total de 12,9 billones dólares (12 billones de euros), frente a los 12,2 billones de dólares (11,3 billones de euros) en 2022, mientras que se espera que las necesidades netas de aumenten en 2023 a 10,6 billones.
No obstante, se ha registrado una caída en relación al PIB, bajando al 83% estimado en 2022, frente al máximo del 90% en 2020.