La ‘tasa Tobin’ recauda menos de lo previsto por Hacienda por la poca actividad de la Bolsa
Fue uno de los grandes errores de cálculo del Gobierno en términos de recaudación hace unos años. Y, después de algo más de dos ejercicios en vigor -se puso en marcha en enero de 2021-, todo apunta a que el impuesto a las transacciones financieras, más conocido como la ‘tasa Tobin’, pasará a la historia más como una piedra en el zapato para la atracción de nuevos inversores que como un plan efectivo a la hora de incrementar los ingresos del Estado.
Los últimos datos públicos de la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) indican que Hacienda ha recaudado 111 millones de euros entre enero y abril con esta tasa, un 4,3% menos que en el mismo periodo del año anterior, cuando se recaudaron 116 millones de euros en esos cuatro meses.
Uno de los motivos de que este impuesto haga aguas con respecto a los cálculos del Ejecutivo es la propia composición del mercado bursátil español. Y es que este año la ‘tasa Tobin’ grava con un 0,2% la adquisición de acciones de empresas cotizadas que tuvieran una capitalización superior a los 1.000 millones de euros a 1 de diciembre de 2022. ¿El problema? Que las caídas experimentadas en 2022 en Bolsa limitó a 52 el número de compañías expuestas al gravamen, por debajo de las 57 de 2021.
Es más, la recuperación que el parqué nacional está viviendo este 2023 -con subidas acumuladas del 13% en lo que va de año- no implica que la recaudación vaya a ser mucho mayor, pues uno de los grandes males que desde hace años, anterior incluso a la implantación del impuesto, arrastra el mercado nacional es un volumen de negociación cada vez más bajo.
Según los datos que maneja BME, la empresa que gestiona los mercados españoles, el volumen negociado en la Bolsa española en mayo —últimos datos disponibles— alcanzó los 22.919 millones de euros. Es un 28,7% menos que el año pasado. Y respecto a abril, la caída es del 16,5%. Por su parte, el número de operaciones registradas en el mes fue de 2,05 millones, un 39,5% menos que en mayo de 2022, pero un 5,7% superior en tasa mensual.
Desde que comenzó el nuevo ejercicio bursátil, el desplome en el volumen negociado en España se acerca al 22%, hasta contabilizar un total de 139.618 millones de euros, mientras que el número de operaciones se redujo un 35,1%, hasta los 12,7 millones de euros.