El euríbor oprime aún más a los hipotecados al superar el 4% en junio
La hipoteca media se encarecerá en más de 250 euros al año
Las previsiones se han cumplido. Y lo hacen para disgusto de los hipotecados a tipo variable y también para aquellos que se han embarcado en la aventura de buscar financiación para acceder a una vivienda. Tras una escalada imparable desde hace prácticamente un año, el euríbor despidió su última jornada de junio en el 4,134%, disparando la media mensual al 4,007%. Hay que retroceder 15 años para ver al indicador en un nivel similar. En concreto, el anterior máximo está en noviembre de 2008, cuando cerró en el 4,35%. Hace ya más de un año, desde abril de 2022, que el euríbor cotiza en terreno positivo, anticipando las subidas de tipos que desde julio ha acometido el Banco Central Europeo (BCE). Diez alzas a una velocidad histórica que han llevado a los tipos de interés del 0% al 4% actual. Y en julio habrá una subida adicional, de otros 25 puntos básicos, hasta el 4,25%. Así que es probable que el euríbor siga su senda alcista, aunque sea a un ritmo más moderado.
Préstamos más caros
Superar esta barrera psicológica del 4% implica, en la práctica, que para una hipoteca de 150.000 euros a 25 años y un interés de euríbor más 1%, la cuota subirá de 793 euros mensuales a casi 877 euros si se revisa de forma semestral, comparando con el 3,018% al que el euríbor cotizaba en diciembre de 2022. Si la revisión es anual (con el euríbor en el 0,852% en junio de 2022), para esa misma hipoteca la cuota pasará de 625 euros a casi 877. Más de 250 euros al mes. O unos 3.000 euros al año.
Hay que tener en cuenta, no obstante, que todo depende del año en el que se firmó la hipoteca y de cuánto se haya amortizado, pues es al principio del préstamo cuando los intereses pesan más frente al principal. Pero la tendencia es clara: «Es de esperar que el euríbor se mantenga en una horquilla de entre el 4% y el 4,3%, al menos durante este verano», explica Estefanía González, portavoz del comparador financiero Kelisto.es. Por eso, aconsejan a los clientes acudir al banco cuanto antes a renegociar condiciones o intentar amortizar deuda. El Banco de España, de hecho, ya ha detectado que cada vez son más los hogares que se ven obligados a tirar de sus ahorros para amortizar sus hipotecas variables. Y las cifras que maneja el Gobierno apuntan a que solo en los cinco primeros meses del año se han amortizado un total de 29.000 hipotecas. Todas ellas fuera de las actuaciones a través del Código de Buenas Prácticas pactado con el sector, que tan solo ha recibido unas 33.000 solicitudes de adhesión, según los datos provisionales proporcionados por el Ministerio de Economía. En todo caso, la ralentización en el mercado de nuevas operaciones es muy evidente ante el rápido encarecimiento de las hipotecas que los bancos lanzan al mercado, añadiendo requisitos mucho más estrictos a la hora de concederlas. Según los últimos datos del INE, la caída en la firma de nuevas hipotecas se aceleró en abril. con una contracción del 18%, encadenando ya tres meses consecutivos a la baja. Y el tipo medio aplicado se mueve en el 3,09%, el más alto desde abril de 2017.