Calviño defiende que su candidatura al BEI es una «oportunidad única» para España
La vicepresidenta primera en funciones, Nadia Calviño, ha defendido este lunes que su candidatura al Banco Europeo de Inversiones (BEI) es una «oportunidad única» para España de acceder a un «puesto de primer nivel» que es «fundamental» para la financiación de «grandes proyectos de inversión». «Es una muy buena noticia para España que podamos presentar una candidatura fuerte al BEI», ha celebrado la también ministra de Asuntos Económicos en funciones en una entrevista en TVE, en la que ha apuntado que para ella es «un honor» que la candidatura lleve su nombre.
Calviño ha reiterado que, tras llevar a cabo «contactos informales» con otros ministros económicos de la Unión Europea, así como con primeros ministros y presidentes, «quedó muy claro que España solo tenía opciones de éxito» si era ella la candidata.
«En un contexto económico como el que tenemos, con una inversión tan importante para el futuro, para la transformación verde y digital de nuestra economía (...) es más importante que nunca que el BEI tenga la mejor gestión y esté a la altura de lo que Europa necesita», ha zanjado la vicepresidenta.
Preguntada sobre la coyuntura del sector turístico, Calviño ha señalado que el verano «sienta muy bien» a la economía españa, la cual tiene un «buen ritmo», con una creación de empleo que «sigue siendo positiva».
La titular de Asuntos Económicos ha indicado, sobre los precios en el sector, que su subida se explica por la salida de la pandemia, en tanto que fue «el sector que más sufrió» y, por tanto, trata de «recuperar los márgenes de beneficios», si bien ha añadido que ya los han recuperado, pero que también se ven afectados por la subida de precios general y la «recuperación de los salarios».
Al respecto de los precios de los alimentos, Calviño ha defendido las medidas puestas en marcha por el Gobierno, que han supuesto la movilización de «45.000 millones de euros de recursos públicos». Con todo, ha indicado que muchos factores afectan al precio de los alimentos, de ahí que el Ejecutivo siga «vigilante» para tomar las medidas.