El PIB de la eurozona crece el segundo trimestre tras estancarse al inicio del año
la economía se estanca mientras España baja su ritmo de crecimiento al 0,4%
La economía de la zona euro registró una expansión del 0,3% en el segundo trimestre de este año respecto al trimestre inmediatamente anterior, cuando permaneció estancada, y tras la caída del 0,1% intertrimestral registrada en el último trimestre de 2022, según los datos publicados este miércoles por Eurostat, la oficina estadística de la Unión Europea. Sin embargo, aunque esto supone un avance, la debilidad del crecimiento económico en la eurozona y en la Unión Europea se ve claramente en las tasas interanuales.
El PIB de la eurozona creció un 0,6% en el segundo trimestre en comparación con el segundo trimestre de 2022, practicamente la mitad del ritmo que había registrado al inicio del año en tasa interanual.
Peor comportamiento tuvo entre abril y junio el Producto Interior Bruto (PIB) del conjunto de la Unión Europea, ya que se estancó tras crecer un 0,2% en el primer trimestre de este año y habiendo registrado también una contracción del 0,1% en los tres últimos meses de 2022. Si lo comparamos con el segundo trimestre de 2022, el PIB de la UE aumentó un 0,5%, la tercera parte de lo que crecía al cierre del año pasado.
En España, los datos registrados muestran una leve disminución en la tasa de crecimiento económico, que pasó del 0,5% del primer trimestre al 0,4% en el segundo trimestre. Pero el país que más preocupa es Alemania, por su capacidad tractora de la economía europea. En su caso, los datos no son halagüeños, aunque mejoran un poco.
Entre abril y junio, Alemania se estancó, después de haber entrado en recesión técnica en el primer trimestre, mientras que Francia aceleró su expansión al 0,5% desde el 0,1%. Por el contrario, en Italia el PIB cayó un 0,3% después de crecer un 0,6% en el primer trimestre.
En el debilitamiento de las economías europeas influye el fuerte aumento de los tipos de interés, con el que el Banco Central Europeo busca controlar la inflación, así como la contención de las exportaciones por la menor demanda de los socios comerciales. Precisamente, China decidió esta semana bajar sus tipos de interés para impulsar la economía.
Europa sigue teniendo menor actividad que Estados Unidos, que en el segundo trimestre creció un 0,6% tras aumentar el PIB un 0,5% en el primero.
Muestra de ese debilitamiento es la caída en la producción industrial, que se redujo un 1,2% en junio tanto en la eurozona como en el conjunto de la UE respecto al mismo mes del año pasado. Sin embargo, en comparación con el mes de mayo, periodo en el que permaneció estancada, la producción industrial desestacionalizada aumentó en junio un 0,5% en la zona del euro y un 0,4% en la UE, según las estimaciones de Eurostat.