Más de la mitad de las viviendas se compran sin pedir hipoteca

La mitad de las viviendas se venden sin necesidad de financiación bancaria. A pesar del descenso en las compraventas, los precios aguantan y los compradores a tocateja se imponen ante las cada vez mayores restricciones de las entidades financieras para conceder hipotecas.

En el mes de agosto, la compraventa de viviendas cayó un 17,3% respecto a igual mes del año pasado, pero mucho más descendió la concesión de préstamos hipotecarios para la adquisición de vivienda, que se hundió un 26,8%, según la estadística del Consejo General del Notariado publicada hoy. En agosto, se formalizaron 17.267 préstamos hipotecarios para adquisición de vivienda con una cuantía de 141.737 euros de promedio, lo que supone un descenso del 1,3% interanual.

El porcentaje de compras de viviendas financiadas mediante un préstamo hipotecario se situó en el 48,9%, menos de la mitad de las adquisiciones, frente al 55,3% de las compras financiadas con hipotecas en agosto del año pasado. También ha caído el porcentaje que representa el préstamo respecto al precio total: este mes de agosto supuso de media el 71,5% y un año antes era el 72,9%.

Que cada vez se compren menos viviendas sin pedir una hipoteca tiene mucho que ver con las dificultades para lograr un crédito y lo caro que se ha puesto, tras las subidas de tipos de interés aprobadas de forma ininterrumpida por el Banco Central Europeo desde hace poco más de un año.

A comienzos de 2022 el precio oficial del dinero estaba en el 0% y ahora está en el 4,25%. Desde enero de 2022 las hipotecas se han encarecido todos los meses (las que están a tipo variable se revisan una vez al año) y para una hipoteca media la subida ronda los 300 euros al mes. Además, los bancos miran con lupa a quién le prestan el dinero para prevenir una subida de la morosidad. Porque, aunque la tasa de mora general se ha mantenido en el 3,5% en julio, los impagos hipotecarios están creciendo (tasa de morosidad del 2,49% en junio, según los últimos datos del Banco de España). Así que pedir una hipoteca es más costoso y difícil y las viviendas son más caras. Por eso, los que compran ahora son en muchos casos inversores, fondos y gente adinerada -bastantes extranjeros- que ven en el sector inmobiliario una forma de inversión más segura y rentable. Y estos compran al contado.

Préstamos

Los préstamos hipotecarios para la adquisición de vivienda no registraron subidas en ninguna autonomía. Sin embargo, tuvieron un mejor comportamiento que la media nacional en Aragón (-15,5%), Castilla-La Mancha (-15,7%), Baleares (-16,9%), Asturias (-18,2%), Galicia (-21,5%), Extremadura (-23,3%) y Castilla y León (-26,4%). Las caídas en las 12 autonomías restantes superaron a la media nacional y destacaron en Navarra (-38,2%), La Rioja (-38,0%), Murcia (-34,9%) y el País Vasco (-31,6%). Por otro lado, Cantabria (-29,9%), Canarias (-29,2%), Andalucía (-28,5%), Madrid (-27,4%), Comunidad Valenciana (-27,0%), Cataluña (-27,0%), Castilla y León (-26,4%), Extremadura (-23,3%) y Galicia (-21,5%) mostraron caídas menos pronunciadas.