El consumo gana fuerza como motor de crecimiento para la economía

Las ganas de disfrutar con amigos y familia se impone, al menos de momento, al ‘efecto carcoma’ que el actual entorno inflacionista está ejerciendo sobre el poder adquisitivo de los españoles. Los últimos datos de Contabilidad Nacional ya demuestran que el avance del 0,3% experimentado por la economía nacional en el tercer trimestre estuvo en buena parte sostenido por el consumo de los hogares (que avanzó un 1,4% en el periodo), frente a la desaceleración que registraron otros componentes como la inversión, que cayó un 0,8%. Buena parte de ese mayor gasto viene derivado, sin duda, del repunte de los precios de básicos como los alimentos, que acumulan ya 18 meses consecutivos —desde abril de 2022— creciendo a doble dígito interanual. Ese mayor coste de la cesta de la compra no ha impedido que terrazas, hoteles y restaurantes estén colgando el cartel de ‘completo’ cada día. Y las previsiones apuntan a que la tendencia seguirá en la recta final del año, un periodo en el que se concentra el grueso de las compras del ejercicio y que este mismo sábado tiene su pistoletazo de salida con el denominado Día del Soltero, cuyo impacto aún se limita a China, país donde nació esta fiesta del consumo a la que en las próximas semanas seguirán el BlackFriday, las compras de Navidad y las rebajas de enero. «Los consumidores llegan a esta época recuperando su poder adquisitivo a través de los salarios y una mayor tasa de ahorro», indican desde KPMG. La resistencia del mercado laboral está detrás de ese mantenimiento del gasto frente a la subida de precios. Una tendencia que también se observa en el seguimiento que, prácticamente en tiempo real, realizan los bancos a través de los pagos con tarjetas de sus clientes. Los analistas de CaixaBank Research hacen este ejercicio recordando que no todas las tipologías de consumo se comportan igual. Por ejemplo, el consumo total de los hogares solo recuperó niveles previos a la crisis sanitaria en el tercer trimestre de 2023, mientras que el de bienes duraderos hace ya más de un año que alcanzó ese hito y ahora está un 7% por encima, según los datos que manejan. La monitorización que la entidad ha realizado indica que, en octubre, el gasto en bienes de primera necesidad presentó un crecimiento sólido, por encima del 10%, «en parte por el notable aumento del precio de los alimentos». Pero frente a la mayor debilidad de otros segmentos como el retail (donde el gasto con tarjeta cae un 4%) o incluso el turismo (alojamientos, agencias..., que cae un 1,8%,), el gasto en ocio y restauración crece un 4,1% interanual en el conjunto del mes. Evolución de precios La subida es inferior a la registrada en septiembre, pero los expertos lo achacan a que el dato está muy condicionado «por la caída que se aprecia en la última semana de octubre», ya que como el festivo del 1 de noviembre cayó en miércoles, menos personas hicieron puente y el consumo de ocio y restauración se resintió. En todo caso, el gasto de los hogares sigue mostrando fuerza en estas partidas. David Martínez, director general de Makro en España, achaca esta situación al esfuerzo que la hostelería ha hecho para adaptar su oferta a los clientes.