Centros de datos, el espacio físico de internet que más necesita tirar de la electricidad
Estos lugares pueden tener un consumo medio de cuatro megavatios
Compras por internet, pagos bancarios y transferencias, vídeos de Netflix o de TikTok o incluso las notas escolares. Todo está interconectado a través de lo que se conoce como la nube y que, aunque parezca ciencia ficción, pesa «mucho». Y es que aunque los servicios digitales estén disponibles prácticamente de manera automática desde cualquier punto del planeta, sí que tienen un lugar físico donde ocurre la interconexión y el cruce de datos de un servicio a otro. Es decir, lo que se produce en internet se procesa en unas máquinas físicas. Estas están alojadas sobre unos centros de datos que necesitan unas condiciones «extremas» y un consumo eléctrico «brutal» para que los servidores de las empresas no dejen de funcionar en ningún momento del día.
Más del 65% del tráfico de internet de la Península pasa por el barrio madrileño de Canillejas.
Ahí es donde se encuentra la mayor interconectividad en España, puesto que es el nodo principal de Telefónica. Sobre cuatro edificios de apariencia normal están alojados los servidores de hasta 400 empresas. Y es que internet no es más que una conexión entre cables y servidores. «O estamos conectados por cable o lo del wifi es mentira», asegura la directora de marketing y desarrollo de negocio de Digital Realty, Raquel Figueruelo, una empresa que se encarga de proporcionar las mejores condiciones para el funcionamiento de los servidores de sus clientes y que los servicios digitales que ofrecen no dejen de funcionar nunca.