Petrodólares por molinos: por qué los países del Golfo quieren la energía de España
El desembarco de fondos árabes se acentúa con la intención de hacerse con Naturgy tras las llegadas a Iberdrola y Cepsa
Que el fondo soberano de un país de la península arábiga, con su correspondiente dependencia del petróleo, se adentre en una compañía española ha dejado de ser una novedad en el ecosistema empresarial. La intención de TAQA, la compañía energética estatal de Emiratos Árabes Unidos, de lanzar una OPA para hacerse con Naturgy, de la mano de CriteriaCaixa, es un paso más de los petro-Estados con una liquidez boyante procedente de sus pozos petrolíferos; y una necesidad de repartir los huevos entre varias cestas para cuando lleguen los últimos días del crudo, a varias décadas vista, eso sí.
El sector energético ya cuenta con intereses del petrodólar en casi todos sus accionariados. Por ejemplo, en el caso de Cepsa, Mubadala (también de Emiratos) posee más de un 60% de la firma. Ese mismo fondo tiene un 3%en Enagás. En Iberdrola, el fondo de Catar llegó en 2011 y ahora tiene un 8,7%. Es su primer accionista. Desde su entrada, la compañía ha crecido «siempre con el apoyo de Catar al modelo de inversión en renovables, redes inteligentes y almacenamiento». Están cómodos con esta posición, apuntan desde la firma presidida por Ignacio Galán.
El relevo del petróleo
Porque en el trasfondo de todas estas operaciones se encuentra un relevo de petróleo por molinos de viento y fotovoltaicas. Para Sergio Ávila, de IG, «la entrada de TAQAen Naturgy marca un punto de inflexión porque podría redirigir la estrategia empresarial hacia energías más limpias, alejándose de los activos tradicionales como el carbón y el gas». Además, Ávila anticipa que esta operación «podría fomentar nuevas inversiones en España, impulsando el crecimiento económico y la innovación en el sector». La razón por la que las monarquías del golfo Pérsico se fijan en España se explica «por su necesidad de diversificar, porque tienen muchos recursos y porque tienen muchos vehículos para invertir en el resto del mundo», según explica Ángel Saz, director de EsadeGeo. Afirma que todas estas economías «tienen ahora muchos recursos por el petróleo pero ya van viendo que sus combustibles fósiles pueden sufrir en el futuro cuando empiece a caer la demanda».
La controversia de esta operación ha obligado al Gobierno a posicionarse, como ya hizo con Telefónica y la llegada de los saudíes de STC. ¿Tan estratégica es Naturgy como para condicionar la OPA e incluso entrar en el accionariado a través de la SEPI? Para Javier Molina, analista sénior de mercados para eToro, la supervisión gubernamental «es necesaria para proteger los intereses nacionales, y también crea un entorno incierto para los inversores, que deben sopesar cuidadosamente los riesgos y beneficios involucrados».
Naturgy cuenta con uno de los grandes activos energéticos para España: el gasoducto que une la península ibérica con Argelia, y por el que recibe actualmente más de un 20% del gas natural que necesita la economía. Por eso, con CriteriaCaixa de por medio, la tranquilidad reina en el Ejecutivo, a la espera de lo que pueda ocurrir, al saber que un socio estratégico liderado por Isidro Fainé, el presidente de la firma, conseguirá llevar a buen puerto la operación sin poner en riesgo el interés estratégico.