Trabajo espera alcanzar un acuerdo para reducir la jornada tras el verano
El Ministerio también planea reformar los despidos para que resulten más «disuasorios»
El Ministerio de Trabajo espera alcanzar un acuerdo con la patronal CEOE para reducir la jornada laboral a 37,5 horas semanales a la vuelta de las vacaciones de verano y hacerlo «rápidamente».
Así lo indicó ayer el secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, en declaraciones a los medios de comunicación tras mantener una reunión con los agentes sociales sobre la reducción de la jornada laboral.
Pérez Rey remarcó que las organizaciones patronales han atendido la propuesta del Gobierno y se han comprometido a estudiarla para tener «una opinión fuerte» al respecto a la vuelta del verano.
Destacó el «tono constructivo» del encuentro en el que se avanzó «de manera positiva» y ha dicho que «están los mimbres para alcanzar un acuerdo».
La negociación tiene tres «elementos clave»: el registro de la jornada laboral, la desconexión digital y la propia reducción de las horas de trabajo, aunque se ha ofrecido a la patronal «margen suficiente» para que «se haga de manera progresiva sin alterar el ritmo de las empresas».
La patronal ha dejado claro que se van a valorar, según ha indicado Pérez Rey, quien ha anunciado la nueva reunión de la mesa para el 9 de septiembre y entonces se intentará «alcanzar un acuerdo definitivo».
En la propuesta se detalla que debe existir un registro de la jornada laboral «digital, fiable e interoperable, es decir, que permita a la inspección de trabajo saber quién trabaja y cuándo» para sancionar cuando haya incumplimientos, ya que «no es de recibo que tengamos una legislación y que sea incumplida».
Sobre el segundo elemento, Pérez Rey ha explicado que «tanto en modalidades presenciales como teletrabajo la gente tiene derecho a la desconexión, es decir, a no coger el teléfono al jefe fuera del horario o no contestar correos» y «no pueden sufrir ninguna represalia» por ello porque «eso daría lugar a una sanción».
Tras la reunión, los representantes de CCOO y UGT han rechazado la posibilidad de retrasar la aplicación de la reducción de jornada en algunos sectores hasta que venzan los convenios vigentes, como había planteado la patronal.
Despidos «disuasorios»
El Ministerio de Trabajo pondrá también en marcha una reforma del despido en el marco del diálogo social con el objetivo de que sea disuasorio y evitar así que se lleve a cabo esta práctica «por capricho» de la empresa, además de que sea «consecuente con los despidos sin causa».
Pérez Rey, hizo ayer esta valoración en declaraciones a los medios tras conocer que el Comité Europeo de Derechos Sociales ha declarado irregular el sistema español de indemnización por despido improcedente, al fijar un tope predeterminado prácticamente insuperable.
En su opinión, «no puede ser que las empresas despidan por capricho o por oportunidad o porque le cogen manía a alguien o porque no atiende alguien una llamada después del trabajo»