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El petróleo se dispara hasta los 80 dólares por la tensión en Oriente Medio

Barriles de petróleo almacenados en un depósito de crudo. EFE/Bagus Indahono

Publicado por
José M. Camarero
Madrid

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El mercado energético mundial vuelve a tensionarse en pleno mes de agosto, con gran parte de las plazas bursátiles funcionando a medio gas, por el impacto que el recrudecimiento de la guerra en Oriente Medio puede tener sobre el petróleo. El barril de Brent reaccionó ayer con muy malas perspectivas, a tenor de los últimos acontecimientos entre Israel, Irán, Líbano y el resto de países de la zona. Su cotización superó los 80 dólares, lo que supone un incremento del 2,3% en un solo día, desde los poco más de 78 dólares en los que cotizaba la semana pasada.

Con este repunte, el crudo vuelve a superar la barrera de los 80 dólares por barril, que había dejado atrás a mediados de agosto, cuando comenzó a descender hasta situarse en los 75 dólares. Sin embargo, este nuevo ascenso llega después de que Israel y la milicia de Hezbollah intercambiaran una nueva ronda de ataques aéreos, avivando las preocupaciones sobre posibles interrupciones en el suministro si el conflicto se intensificara.

Si estos precios se cronicifan, los de los combustibles también comenzarán a subir en plena operación regreso de las vacaciones, después de un verano en el que el coste de llenar el depósito se ha mantenido más o menos estable con varias semanas del diésel y la gasolina a la baja.

Los mercados quieren paz

La Bolsa también ha sentido los efectos de la escalada bélica en torno al conflicto en Israel y todos los territorios cercanos. El Ibex-35 se ha dejado un mínimo 0,11% este lunes, en un empantanamiento de cotizaciones hasta los 11.265 puntos. Los inversores no ven con buenos ojos el recrudecimiento de la tensión en Oriente Próximo y esperan que cualquier acontecimiento en pleno agosto no repercuta negativamente en la cotización de las empresas. 

La respuesta del Ibex y del resto de plazas europeas (casi todas han cerrado en plano) ha sido, además, la primera tras anunciar el presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED), Jerome Powell, en el cónclave de Jackson Hole, su intención de recortar los tipos de interés oficiales en septiembre.

Powell no dejó lugar a las dudas y anunció con rotundidad que empieza el recorte de tipos.