Escrivá alerta al Gobierno de la caída del consumo incluso en rentas altas
El turismo internacional y las exportaciones impulsarán el crecimiento hasta el 2,8% este año
Ningún organismo económico preveía que 2024 sería un año tan potente. Las proyecciones de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) no paran de mejorar y desde que el Gobierno actualizó las suyas (al 2,4% del PIB en 2024) ya hay algunos que respaldan esta cifra e incluso que la superan. El Banco de España presentó este martes su primer informe bajo los mandos del exministro José Luis Escrivá y fue el primer organismo que sitúa el crecimiento de España muy cerca del 3%. Calculan que la economía avanzará un 2,8% este año, medio punto más que su previsión de hace solo tres meses, sobre todo por la sorpresa que dieron el primer y segundo trimestre, así como su estimación de que en el tercero el PIB siga avanzando un 0,6%.
El director de Economía y Estadística, Ángel Gavilán, reconoció estar «sorprendido» por estas cifras, que no solo se ciñen al PIB, sino que también mejoran en inflación, deuda pública e incluso en la tasa de paro prevista para los próximos años. El importante nivel de crecimiento se debe, fundamentalmente, a la buena marcha del turismo internacional, que ha sorprendido al alza en la primera mitad del año.
De hecho, el turismo extranjero y la mejora de las exportaciones de servicios no turísticos son los elementos sobre los que se apoya el crecimiento, ya que el consumo y la inversión empresarial está debilitándose. El Banco de España alerta de que a futuro las tasas de ahorro y la bajada de tipos irá mejorando estos niveles, pero actualmente el consumo per cápita sigue tres puntos porcentuales por debajo de los niveles prepandemia. Las grandes partidas de gasto, como los automóviles, se ha desacelerado y «no parece que vayan a mejorar significativamente» en los próximos trimestres.
La debilidad del consumo se percibe incluso en los grupos de rentas altas. Gavilán explicó que estas familias pueden estar canalizando lo que no gastan hacia el ahorro y los fondos de inversión. En los grupos de mayor edad (más de 65 años) el consumo muestra un mayor dinamismo, probablemente porque su renta real también le ha ido mejor en relación con otros grupos poblacionales por la actualización de las pensiones con el IPC, revela el director de Economía.
También mejoran las proyecciones económicas para el año que viene y el siguiente. En concreto, el organismo prevé que 2025 cierre con un crecimiento del PIB del 2,2% y del 1,9% en 2026, lo que significan tres y dos décimas más de avance respectivamente que en el informe anterior. Un crecimiento previsto del 2,8% para este año supone que España se sitúe muy por encima de la media europea, pero también por encima de su capacidad de crecimiento potencial, que está en torno al 2%, según Gavilán, que explicó que esta será la tasa de crecimiento a la que vaya aproximándose poco a poco el PIB.
El director de Economía del Banco de España apuntó que en los próximos años el crecimiento tendría que provenir más de la demanda interna en lugar de la externa. La inflación se irá reduciendo paulatinamente hasta quedarse muy cerca del 2% (objetivo del Banco Central Europeo) en 2025. Para este año la tasa de precios cerrará en el 2,9%, medio punto por debajo del nivel de 2023, después de la crisis inflacionaria que se ha vivido en toda Europa los últimos dos años. Los precios se están desacelerando de forma más intensa de lo previsto por el Banco de España, gracias a la caída de los alimentos frescos y la energía.