Escrivá vigila la relación entre los bancos y las tasadoras inmobiliarias
El Banco de España vuelve a poner el foco sobre las tasaciones inmobiliarias, coincidiendo con un momento de revuelo extremo por la evolución de los precios de la vivienda en el país. El supervisor ha detectado ciertas prácticas en la relación entre algunos bancos y las tasadoras —solo en casos muy concretos— que obligan a mover ficha para evitar posibles riesgos para la independencia y la calidad de las valoraciones de los activos. Fuentes del sector financiero indican a este diario que se trata de casos y deficiencias muy puntuales que «no han generado una gran preocupación ni cuestionan la independencia de las tasadoras». Pero reconocen que el supervisor ha requerido una mejora en la relación entre las partes para evitar problemas futuros. Fue el pasado junio cuando el Banco de España remitió una carta a sus supervisadas para advertir de estas prácticas que, al final, afectan al mercado hipotecario. Según informa Bloomberg, el organismo quiere evitar a toda costa cualquier riesgo que suponga la pérdida de «la independencia entre entidades de crédito y sociedades de tasación».
Un toque de atención que ha sido acogido con cierta sorpresa entre los bancos, que recuerdan que la regulación ya se modificó hace años.