Cerrar

La escasez de vivienda puede ahogar la inmigración y repercutir en el crecimiento

En los próximos dos años se construirán un 17% más de viviendas, una tasa «insuficiente»

Isabel Rodríguez es la ministra de ViviendaCARLOS LUJÁN

Publicado por
EDURNE MARTÍNEZ
Madrid

Creado:

Actualizado:

La crisis de la vivienda tendrá su repercusión en el crecimiento económico tan vigoroso de España. Pese a que todos los organismos están actualizando al alza sus previsiones del Producto Interior Bruto (PIB) para este año y el que viene, los analistas de BBVA Research reconocen que los elevados precios de la vivienda por la «evidente falta de oferta» pueden convertirse en un «cuello de botella» que «ahogue» la inmigración, lo que a su vez repercutirá directamente en el crecimiento del país, sobre todo en las grandes capitales.

Las proyecciones de llegadas de inmigrantes están superando las expectativas del INE que auguraban que en la próxima década vendrían a nuestro país unas 3 millones de personas a razón de 300.000 al año. «Estas personas necesitan una vivienda, pero si es un bien escaso y caro se puede convertir en un factor limitante de la propia inmigración», explica Rafael Doménech, director de Análisis Económico de BBVA Research. Es más, desde el gabinete de estudios de la entidad reconocen que los altos precios de la vivienda pueden afectar también a la movilidad geográfica de los trabajadores nacidos en España, que empiezan a rechazar ofertas de trabajo en Madrid o Barcelona por este motivo.

Según sus cálculos, en los próximos dos años se construirán solo un 17% más de viviendas, lo que sigue siendo «completamente insuficiente» para aliviar el problema de la falta de oferta. El Banco de España estima que se necesitarían unas 600.000 viviendas, y se están construyendo 120.000 en todo el país anualmente. «La falta de oferta seguirá presionando al alza los precios», auguran los economistas de BBVA Research. Pese a ello, el organismo prevé que la economía española crezca un 2,9% este año y un 2,4% el que viene, cuatro y tres décimas más respectivamente que en sus cálculos anteriores. La razón fundamental es la revisión al alza que hizo el INE de sus series estadísticas hace unas semanas y la sorpresa positiva de la inflación.

Los economistas esperan que tras crecimientos trimestrales del 0,8% en los dos primeros tramos del año, en el tercer trimestre la economía siga avanzo a un ritmo del 0,7% para cerrar el año creciendo un 0,6%.