Las cámaras de comercio piden prolongar el doble etiquetado porque los consumidores piensan aún en pesetas
Economía reconoce que el euro ha encarecido el coste de la vida
El Gobierno considera un éxito el primer año del euro como moneda física en España, a pesar de reconocer que la gran mayoría de los españo
De Guindos no tuvo más remedio que reconocer que el gran problema ha sido el encarecimiento por encima de lo normal del gasto básico de los consumidores, sobre todo por los problemas que ha generado el redondeo al alza del precio en euros de ese tipo de productos. El propio vicepresidente económico del Gobierno, Rodrigo Rato, anunció el pasado mes de mayo la elaboración de un estudio para analizar ese fenómeno y vigilar qué productos han subido en exceso al cambiar sus precios a euros, incluso por comunidades autónomas. Desde el Gobierno no se descarta seguir la recomendación de las cámaras de comercio y alargar el periodo en el que se pueden mantener los precios con doble etiquetado, en euros y pesetas. El «código de buenas prácticas», sin ser obligación legalmente establecida, sino un compromiso o recomendación surgido a iniciativa europea, establecía que ese doble etiquetado fuera obligatorio en los primeros tres meses del año pasado, con la llegada del euro. Muchos centros comerciales y grandes cadenas se comprometieron a mantenerlo hasta mediados de año e incluso en todo el ejercicio, pero con la norma europea de que se eliminase esa práctica en el primer semestre del 2003. La propuesta de las cámaras, cuya red de 85 instituciones en toda España les permitió ser uno de los principales agentes activos para la implantación del euro, pasa por flexibilizar ese plazo y permitir que se mantengan los precios en las dos monedas por más tiempo, a la vista de que para una gran mayoría de los ciudadanos españoles, después de un año, sigue teniendo a la peseta como única referencia a la hora de analizar y comparar los precios de los productos. La oposición socialista culpa al Ejecutivo por el escaso control que tiene sobre la inflación, que acabará el año en el doble del 2% recomendado en la eurozona. Dado que esa mayor carestía del coste básico de la vida cotidiana se ha dejado notar con claridad, el Gobierno anunció a finales del año pasado la puesta en marcha de una campaña informativa que se están llevando a cabo tras doce meses de implantación.