Los políticos y empresarios tratan de recuperar en Davos la confianza tras los escándalos

Dirigentes políticos y empresarios de los cinco continentes se reúnen a partir de hoy en el Foro Económico Mundial de Davos, centrado este año en el restablecimiento de la confianza, gravemente afectada por los escándalos empresariales. En este asunto coinciden tanto los organizadores del Foro como los comentaristas, al destacar que la cita no servirá esta vez de plataforma para el autobombo de los hasta hace poco llamados «amos del universo». Muchos de esos «global players» («actores globales») de la economía, como se les conocía de manera rimbombante en el Foro, son hoy ídolos caídos de sus pedestales: las imágenes de algunos de ellos conducidos esposados por la policía se han visto en todo el mundo. Altos ejecutivos celebrados algo así como los genios de la llamada «nueva economía», que prometían un crecimiento sin límites, quedaron finalmente en el mejor de los casos como charlatanes y en el peor como simples estafadores, causando gravísimo daño al mundo empresarial. Algunos de los que han salido indemnes de esos escándalos, apeados de su arrogancia de entonces, vuelven ahora a Davos para intentar devolverles a los inversores la confianza perdida en estos años y abogar por una nueva ética empresarial, que garantice la transparencia de las operaciones.