El euro alcanza un cambio de 1,1 dólares, el más alto en cuatro años

Los principales parqués bursátiles europeos terminaron las negociaciones con pérdidas, a excepción de las leves ganancias de Madrid y de la evolución de Francfort a media tarde, en una jornada en la que prosiguieron los nervios por las consecuencias económicas de una guerra en Irak. En la sostenida apreciación del euro han influido, según los expertos, los comentarios del secretario estadounidense del Tesoro, John Snow, que restó importancia a la evolución del dólar. La política del dólar fuerte ha sido característica de la administración norteamericana desde hace quince años. Snow aseguró que Estados Unidos no está «particularmente preocupado» por la bajada registrada en la cotización del dólar. En su opinión, aumentos y descensos de la divisa americana son lógicos, porque la monea «está en los mercados y fluctúa en los límites normales. Reconoció, no obstante, que la eventualidad de una guerra complica la marcha de las economías estadounidense e internacional, e incide en la cotización del precio del petróleo. Aunque la posible rebaja del precio del dinero en la zona euro, por la que apuestan los mercados, podría afectar al cambio de la divisa europea, los expertos consideran que la cotización del euro se moverá por encima de la paridad con el dólar en el medio plazo. El euro -que nació en enero de 1999 con un cambio de 1,1782 dólares, considerado una cotización elevada- emprendió una carrera descendente que le llevó un año después a niveles mínimos de 0,8225 dólares. Una acción concertada de los bancos centrales le permitió recuperar el pulso. La relación entre las dos monedas que se disputan la primacía de los mercados del dinero no ha estado en relación con los fundamentos de la economía de las distintas áreas monetarias en cada momento. El colosal déficit exterior de los EE.UU. nunca justificó la fortaleza del billete verde, sino todo lo contrario. Ventajas La apreciación del euro tiene ventajas para las economías de la zona (reduce el coste de las importaciones energéticas y el de los bienes intermedios comprados en el exterior), pero resta ingresos por exportaciones en momentos en que los países europeos están necesitados de reactivación. Lo recordó este miércoles el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo Rato, que atribuyó la revalorización del euro a la actual situación de «volatilidad» económica y pronosticó que, en el futuro, la divisa europea contará con un «mayor equilibrio con el dólar». Rato, tras presidir la reunión de la Comisión Interministerial para coordinar planes de ayudas humanitarias al exterior, explicó que la fortaleza del euro responde «desde el punto de vista técnico a la realidad de la economía europea». Destacó que la situación presenta ventajas como la «reducción de la factura energética», y el inconveniente de que «exige una mayor competitividad de la economía europea en cuanto a exportaciones se refiere». También evocó que un euro fuerte debe ser tomado en cuenta por el Banco Central Europeo en sus decisiones sobre el precio oficial del dinero.