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OPINIÓN Antonio Casado

La caída de los «Albertos»

Publicado por
León

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A partir de un braguetazo (sus respectivos matrimonios con las supermillonarias hermanas Koplovitz), quisieron ser los reyes en la construcción y la banca, pero acabaron en la cárcel. Por medio, pelotazos, escándalos, divorcios y un impresentable concubinato, como diría Saramago, con los editores del boletín oficial del Estado. En el BOE se publican las adjudicaciones de obras públicas y también las sentencias judiciales. Conforta que el Estado de Derecho funcione y ponga en su sitio a quienes, en este caso, estafaron a sus propios accionistas de Urbanor. Por la venta de unos solares de la plaza de Castilla que, a su vez, los «Albertos» habían recibido en pago por sus antiguas acciones en el Banco Central. Qué cosas. El destino de Alberto Alcocer y Alberto Cortina estaba escrito debajo de sus célebres gabardinas. Unos gabanes albinos de alma negra que los magistrados han dejado al descubierto. Viejas historias del tiempo de aquellos «jóvenes nacionalistas» (diagnóstico de la Casa Blanca) recién llegados al Poder bajo la batuta de Felipe González. «España es un país donde uno puede hacerse millonario en una semana», había dicho Carlos Solchaga. Los primos tomaron nota y se aplicaron el cuento. Se hicieron supermillonarios, pero de aquella manera, acudiendo a los circuitos especulativos. Los socialistas y la beautifull people. Gentes guapas como Javier de la Rosa, Juan Abelló, Mario Conde, Mariano Rubio, Manuel de la Concha, Prados, Rubios, Sotos, Botines, Romanís, etc., con sorprendente capacidad de adaptación a los usos y costumbres del socialismo que acababa de descubrir la moqueta de los despachos oficiales y también se acoplaba a los juegos del poder real. Gente guapa que acabó cargándose el mito de la superioridad moral de la izquierda, porque la mancha de la corrupción, el dinero fácil, el pelotazo, el comisionismo, las cacerías y hasta la epidemia de amores tardíos, fueron rasgos que quedaron inevitablemente cosidos a la imagen del felipismo reinante en la segunda mitad de los ochenta y primeros años de los noventa.

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