Ropa y calzado suben el IPC en España un 0,8%

Los precios subieron ocho décimas en abril, porque vestido y calzado se dispararon al concluir la época de rebajas y gracias al abaratamiento de gasolinas y gasóleos, a los que se trasladó parte del descenso del crudo, la inflación acumulada en lo que va de año es de 1,3 puntos y la interanual se ha situado en el 3,1%, tras bajar seis décimas en un mes. En cambio, la inflación subyacente, que marca tendencia y no computa alimentos no elaborados ni precios energéticos, sube una décima hasta el 3,3%. La tasa interanual es la más moderada desde enero del 2002. En aquella ocasión, la primera que reflejó el impacto de la introducción del euro, el dato del 3,1% fue muy polémico, al haber aplicado el INE un cambio de metodología. Con criterios que aplica toda la Unión Europea, la inflación anual de España quedó este abril en el 3,2%. Fuerte subida de ropa y calzado El pasado mes, vestido y calzado subieron nada menos que el 8,7% (un 9,3% las prendas de vestir) y su impacto, equivalente a casi totalidad de las ocho décimas de aumento del índice general. Aunque los precios de estos artículos se situaron en niveles propios del comienzo de temporada, este capítulo de gastos se ha convertido en el más inflacionista de la cesta de la compra con un aumento del 5,5% en los últimos doce meses. También subieron un 1,5% los paquetes turísticos, por coincidir en abril las vacaciones de Semana Santa. Idéntica razón provocó el encarecimiento de los hoteles, cafés y restaurantes en el 0,7%, aunque en este caso la culpa hay que atribuirla en su totalidad al 6,8% de encarecimiento de los hoteles. Igualmente se encarecieron el pasado mes la medicina, un 0,7%, y el menaje del hogar, el 0,6%. Las subidas de abril se vieron compensadas por el descenso de los carburantes en un 4,2% y de otros combustibles en un 12,3% respecto a marzo, bajada que restó tres décimas al índice general. La volatilidad de los derivados del petróleo y su peculiar evolución y reparto estadístico se refleja en el dato de una subida del gas en un 3% en abril, recogida en el capítulo de vivienda, que, en conjunto, no experimentó variación. Los alimentos y bebidas no alcohólicas mantuvieron su precios sin cambios el pasado mes. No obstante, las patatas y sus preparados se encarecieron el 5% (han bajado el 7,8% en un año), los crustáceos y moluscos subieron el 0,9% y el pan y las frutas frescas aumentaron sus precios el 0,5% respecto a marzo. El conjunto de la alimentación ha experimentado un descenso de siete décimas, superado por las bajadas del 1,4% en el pescado fresco y congelado y del 1% en la carne de pollo.