Veintinueve detenidos en Sevilla por un fraude fiscal inmobiliario

La Agencia Tributaria desmanteló este martes una red de fraude fiscal en Sevilla por 15 millones de euros generado mediante la emisión de facturas falsas emitidas por empresas sin actividad real, que aprovechaban otras sociedades del negocio inmobiliario para recuperar el IVA y reducir el pago del Impuesto de Sociedades, según explicó el director de la Agencia Tributaria, Salvador Ruiz-Gallud. La trama se realizaba entre la capital hispalense y las localidades sevillanas de Dos Hermanas, Camas, Utrera y Olivares, en las que se ha detenido a 29 personas, entre las que había relaciones claras de parentesco. Los implicados realizaban una operativa clásica de fraude con facturas falsas, a través de tres niveles diferentes: En primer lugar, un grupo de empresas sin actividad real pero supuestamente dedicadas al sector auxiliar y de servicios a la construcción, emitía las facturas originales, con su principal y el correspondiente IVA. Estas entidades declaraban a Hacienda por el sistema de Estimación Objetiva por Índices y Módulos, en el que no se declara por la facturación real de la empresa, sino por un cálculo estimado sobre su actividad en virtud de una serie de facturas, como la superficie, los empleados, la energía consumida, etc. Es por ello que podían emitir facturas con unas cantidades que no tenían porqué corresponderse con lo que declaraban a Hacienda. En un segundo nivel, se encuentra toda una trama de sociedades instrumentales, casi todas a nombre de familiares y allegados de los primeros, que compraban esas facturas como justificantes de su actividad, pero que en realidad no hacían nada. Su única finalidad era aumentar y complicar la trama para diluir en lo posible el rastro de las facturas falsas que emitían las primeras y ocultar los verdaderos centros de decisión y responsabilidad. Sociedades inmobiliarias En el tercer lugar es donde se encuentran las sociedades inmobiliarias, con actividad real, que compraban esas facturas por una comisión sobre el principal de cada una de ellas. Con ello, a la hora de declara a Hacienda, descontaban el IVA que figuraba como pagado (el 100%) y descontaban de sus beneficios el supuesto pago del principal de la factura, con lo que reducían la base imponible del Impuesto de Sociedades que grava esos beneficios, con una tasa del 35%. Esa operativa, típica de este tipo de fraude, permitía a las inmobiliarias retirar de sus ingresos el dinero que se descontaba de las facturas y generar cantidades de «dinero negro» con las que las inmobiliarias podían operar dentro de su actividad, en un mercado en pleno apogeo en el que no dejan de subir los precios de la vivienda y puede ser muy útil utilizar cantidades fuera del alcance de Hacienda para declarar importes menores a la hora de tributar. Las detenciones se han realizado a través de la juez titular del Juzgado de Instrucción número 4, en Dos Hermanas,