Zaplana admite que España necesita una reforma para mejorar el empleo

«Las reformas laborales que se tienen que hacer tendrán que ver con la calidad del empleo», aseguró ayer el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Eduardo Zaplana. Consciente de que la legislatura termina y de que ya no hay tiempo para mas modificaciones, insistió en que España necesita en el futuro inmediato continuar con su proceso de cambios para «seguir avanzando en la estabilidad en el empleo y en la productividad de nuestras empresas». Zaplana se refirió al salario mínimo interprofesional (SMI), cuya reestructuración demandan CC.?OO. y UGT insistentemente. Señaló que se trata de una retribución con repercusiones muy amplias, puesto que no se limita a un simple salario percibido por miles de trabajadores sino que se usa de referencia para otras cuestiones ciudadanas, como son el acceso a la vivienda oficial o a los cursos de formación. Asimismo es decisivo para pagar determinados impuestos. A los pocos días de tomar posesión de su cargo como ministro, Zaplana se mostró dispuesto a abrir un proceso de negociación sobre el SMI y así se lo comunicó a las centrales. Sin embargo, los contactos no han prosperado y ahora el titular de Trabajo resalta que antes de adoptar cualquier modificación es preciso llevar a cabo estudios y análisis detallados, puesto que los cambios supondrían «una reforma legislativa muy compleja». «Ofrecí a los sindicatos cuando me lo plantearon y lo sigo haciendo el establecimiento de una comisión para estudiar cómo se puede evitar esa referencia permanente que dificulta en gran medida tomar una decisión», añadió el ministro. En relación con el mercado laboral, Zaplana hizo balance de las mejoras conseguidas en la presente legislatura y asumió que todavía queda camino por recorrer para la mejora de la calidad de la contratación, pero lamentó que algunos (en alusión a los socialistas) se limiten a propagar que España encabeza el paro de la Unión Europea (UE) y que cuando se les remite a la creación de puestos de trabajo en los últimos tiempos acudan a «la muletilla» de la precariedad del trabajo. En este sentido, el ministro apuntó que «es verdad» que el país cuenta con un elevado índice de temporalidad, pero también es cierto que, junto con Irlanda, ha sido el Estado que más ha reducido la eventualidad laboral.