París apuesta en el futuro por «enriquecer» el pacto

El ministro de Economía de Francia, Francis Mer, no se esforzó ayer ni un ápice en disimular su gesto de satisfacción cuando compareció ante los periodistas para dar cuenta del acuerdo que paralizó las sanciones por déficit excesivo contra su país. La decisión «respeta el espíritu», dijo, del Pacto de Estabilidad, que «es posible que necesite ser enriquecido» en el futuro próximo para convertirlo en un instrumento «más vivo y útil». En cualquier caso, la decisión seguirá obligando a París a hacer grandes sacrificios para sanear sus finanzas públicas y volver a una situación de equilibrio presupuestario. La única diferencia es que va a disponer de un año más de plazo para ejecutar medidas drásticas, entre las que figura la supresión de un día festivo del calendario laboral, lo que le permitirá al Estado ingresar hasta 1.900 millones de euros, o la supresión de 33.561 puestos de trabajo en la Administración pública.