El beneficio neto cayó un 16,2%, aunque antes de impuestos se mejoró un 12,9%
La cuenta de pérdidas y ganancias de Caja España correspondiente al 2003 refleja una mejora del beneficio antes de impuestos, que con 84,27 millones de euros mejora en un 12,9% el resultado del ejercicio anterior, pero que después de saldar cuentas con Hacienda se queda en 66,59 millones de euros que empeoran en un 16,2% el resultado neto con que Caja España cerró el año 2002. Esta aparente contradicción se explica, según comentó ayer el director general de la entidad, José Ignacio Lagartos, en el hecho de que en el año 2002 hubo ciertas operaciones de inversión que mejoraron la fiscalidad, como fue la reinversión deducible en participaciones de Fadesa y Ebro Puleva de las plusvalías que se obtuvieron con la venta del 50% de la participación en Caja España Vida. Beneficios de la innovación Lagartos destacó dentro de la cuenta de resultados, el incremento del 40,2% en los contratos de banca por Internet y telefónica, que en el 2003 alcanzaron los 206.458, y que el primer ejecutivo de la entidad interpreta como «el fruto de la estrategia de Caja España de apostar por la innovación y la tecnología al servicio del cliente». En materia de previsión de riesgos, la tasa de morosidad de Caja España se situó al cierre del 2003 en el 0,82%, mientras que la tasa de cobertura, del 258,07%, refleja que los fondos de insolvencias superan ampliamente el volumen de los riesgos dudosos y morosos. El director general se refirió a la situación de la entidad como la de «una caja muy sólida, cuyo nivel de provisiones supera ampliamente, e incluso de forma holgada los requerimientos legales», dijo. Evolución de los créditos La cuenta de resultados que ayer aprobó el consejo de Caja España refleja a 31 de diciembre pasado un total de 13.721,85 millones de euros en recursos de clientes, con un incremento anual del 9,8%. La inversión crediticia neta alcanzó en el 2003 los 7.818,34 millones, con un crecimiento anual del 11,6%, que en el caso del crédito hipotecario se eleva hasta el 20,8%. Estos resultados permiten a Caja España mantener su décima posición en la clasificación de cajas, tanto en depósitos como en créditos.