Miles de empleados de astilleros exigen en Madrid más trabajo

Miles de trabajadores de los astilleros Izar se manifestaron hoy por las calles de Madrid para reclamar la firma de un convenio colectivo y más carga de trabajo para los astilleros civiles, con el fin de garantizar la viabilidad de la empresa. Los responsables de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) y del grupo público de astilleros insistieron en que las reivindicaciones salariales planteadas por los sindicatos son desproporcionadas e impiden la viabilidad empresarial por lo que no contarán con su respaldo «sea cual se la forma de manifestarla». Unas 11.000 personas según los sindicatos y 3.500 según la Delegación de Gobierno se manifestaron por la calle Velazquez hasta desembocar ante la sede de la SEPI, accionista universal de Izar. Un total de 110 autobuses llegaron a la capital, 52 procedentes de Andalucía, 230 de Galicia, 15 del País Vasco, siete de Asturias, cinco de Valencia y una de Murcia. La marcha coincidió con una huelga de 24 horas convocada en todos los astilleros del país, a la que seguirán paros de tres horas los días 11, 24 y 31 de este mes. Los representantes sindicales aseguraron que sus reivindicaciones no son políticas ya que sólo piden que se asegure el futuro del sector. Los trabajadores rodeados de una intensa presencia policial y vigilados por un helicóptero, portaron como pancarta de cabecera la frase «Por el futuro de Izar. Carga de trabajo». Durante la concentración no se registró ningún incidente aunque los gritos y las consignas junto con el lanzamiento de petardos fueron reiterados a lo largo del recorrido. 'Si esto no se arregla, gu Méndez, pidieron al Gobierno y la Sepi que cumpla sus compromisos y dé trabajo a los empleados de astilleros para garantizarles así el futuro. De lo contrario, los trabajadores han anunciado que mantendrán la presión sindical para lograr sus objetivos. Cándido Méndez afirmó que ni la Sepi, ni el Gobierno, ni Izar han dado respuestas a las reivindicaciones de los trabajadores. El dirigente de UGT quiso recalcar que el conflicto de astilleros es sociolaboral y no político. En su opinión, el sector de los astilleros es muy necesario en España ya que produce bienes de ámbito civil y de defensa. Los trabajadores insisten en que desde el Gobierno está manipulando la información. Aseguran que la Sepi cree que es incompatible una subida salarial de 6,8 por ciento para la competitividad de los astilleros, «pero lo que no dicen es que esta subida es la suma de los tres últimos años en que sus salarios han estado congelados». Los empleados persiguen cerrar la renovación del convenio colectivo y defienden que las diferencias de coste entre su propuesta y la oferta de la empresa apenas alcanzan el 0,2 por ciento en tres años.