El sindicato exige en el congreso la continuidad del Plan Galicia y su implementación económica | Entrevista | José María Fidalgo |
Fidalgo, reelegido secretario de CC.OO. con más del 60% de apoyos
El líder se muestra orgulloso de los logros de la Ejecutiva desde el 2000 porque «son de todos» El secretario gen
El 61,4% de los delegados asistentes al octavo congreso confederal de CC.OO. aprobó ayer el informe de gestión de los últimos cuatro años de José María Fidalgo, que fue reelegido también secretario general del sindicato hasta el 2008. La nueva ejecutiva de la central contará con dos gallegos, Salvador Bangueses Bangueses, que era ya secretario de relaciones institucionales en el anterior mandato, e Ignacio Fernández Foxo, secretario general de la federación gallega de minerometalurgia que se incorpora como nuevo. Fidalgo hizo suyas las palabras de la jornada inaugural del secretario general gallego Xan María Castro y aseguró que CC.OO. exigirá «la continuidad del Plan Galicia y su implementación económica». En su intervención ante el plenario del octavo congreso antes de la votación, Fidalgo hizo un discurso en el que aludió a las discrepancias en el seno del sindicato asegurando que «las diferencias internas no se superan con integración de sillas, sino mirando todos hacia el mismo lado». La defensa de Fidalgo duró media hora. Negó, entre otras cuestiones, que haya mantenido una postura «arrogante» a lo largo de su mandato. Su discurso estuvo cargado de preguntas, que el mismo contestó. A continuación, pasó a la acusación. Señaló que las diferencias en CC.OO. no obedecen a los debates de contenido sino a la búsqueda de un lugar en la dirección. Logros Fidalgo se mostró orgulloso de los logros de la Ejecutiva en los últimos cuatro años porque, según dijo, «son de todos», y resaltó haber logrado más capacidad contractual en la negociación colectiva, el que tanto la pensión media como la mínima hayan aumentado en relación a los últimos ocho años, así como la extensión de las cláusulas de revisión salarial y de fomento de igualdad de oportunidades. Tras rechazar que el sindicato, bajo su mandato, «haya perdido credibilidad y haya ganado en conformidad y pasividad ante el anterior gobierno del PP y la patronal», recordó a sus críticos que «donde se movía una pluma hemos estado y con logros». Anoche salió reelegido se-cretario general de CC.OO. y a pesar de las críticas internas que ha recibido durante la celebración del octavo congreso del sindicato se arrepiente de pocas cosas. Cree, sinceramente, que no es cierto que haya crisis en la central y presume «orgullosa pero responsablemente» de los resultados de su gestión. 1397058884 Ha sido un congreso bronco. ¿Hay o no hay crisis interna en CC.OO.? -Ha sido un congreso como todos los de CC.OO. No creo que nadie pueda decir que hay crisis en CC.OO., es el primer sindicato del país, tiene más afiliados que nunca y hemos trabajado mucho estos cuatro años. Hemos tomado muchas decisiones y nunca hemos dejado pasar ningún balón. Es lógico que después de cuatro años haya opiniones para todos los gustos. -¿Qué siente cuando le acusan de haber hecho seguidismo del PP? -Lo mismo que sentiré cuando dentro de un año me acusen de haber pactado demasiado con el PSOE. Nada. Siento que he hecho lo que tenía que hacer. -En su discurso del otro día anunció ante Caldera que no serían hiperexigentes con el PSOE. ¿Dónde estarán los límites? -Ese mismo día fijé nuestros límites aunque de manera educada. Queremos reducir la temporalidad y no aumentarla, reducir la precariedad, queremos aumentar la protección social, armonizar la igualdad de trato entre personas de distinto sexo y fortalecer la inversión productiva para fomentar la competitividad en lugar de reducir los costes de la mano de obra... -¿La mención al uso del derecho de huelga que hizo fue un aviso para navegantes al PSOE? -No. La puse sobre la mesa porque hace dos años logramos retirar el decretazo con una huelga y, pese a todo, se discutió mucho sobre si era o no era legítimo haberla convocado. -¿Es más fácil o más difícil la acción sindical con un gobierno de izquierdas? -Es igual. El 80% de la acción sindical se realiza en la prensa y la actitud de las empresas no cambia porque cambie el gobierno. Nuestro programa tiene coincidencias evidentes con el del PSOE y si es coherente el encuentro será fácil. Auguro una etapa de acuerdos. -Después de este congreso, ¿cambiará su actitud respecto a los sectores críticos en aras de una mayor unidad interna? -Los que tienen que cambiar su actitud son los que predican falsedades y lanzan hacia fuera el mensaje de que hay crisis. Este sindicato tiene cauces de diálogo. -Su antecesor, el señor Gutiérrez, ha dado el salto a la política. ¿Se lo plantea usted? -No voy a dedicarme a la política partidaria jamás, aunque me parece dignísima.