Los 25 rechazan firmar un acuerdo de «cielos abiertos» con EE.UU.
Los ministros de Transportes de los 25 rechazaron ayer firmar un acuerdo de «cielos abiertos» entre la UE y los Estados Unidos para crear un mercado aéreo único porque consideran que el Gobierno norteamericano no ha realizado suficientes concesiones en el acceso a su mercado, y pidieron a la Comisión que siga negociando. «Consideramos insuficientes las concesiones de los Estados Unidos, porque da a las aerolíneas norteamericanas una posición de ventaja respecto a las europeas», explicó la comisaria Loyola de Palacio. La responsable de Transportes y Energía en el Ejecutivo comunitario anunció que continuará negociando y que «no renuncia» a cerrar un pacto antes de la cumbre entre la UE y EE.UU. que se celebra los días 25 y 26 de junio en Dublín. De Palacio subrayó que la mayoría de Estados miembros piensan que se han dado importantes pasos adelante hacia el acuerdo, salvo uno, que se mostró «muy crítico», en referencia a Reino Unido. Los británicos consideran que la Comisión «ha conseguido muy poco» de los norteamericanos a cambio de un acceso preferente a los aeropuertos de la UE, especialmente el de Heathrow, que concentra el 40% de los vuelos transatlánticos. El acuerdo exige la unanimidad de los 25 ministros. Los norteamericanos han aceptado la llamada «cláusula de preferencia europea», que permitiría volar a las compañías comunitarias a los Estados Unidos desde cualquier aeropuerto de la UE. También están dispuestos a aceptar que los europeos puedan adquirir hasta el 49% de una aerolínea norteamericana, en lugar del 25% actual. Pero Washington rechaza radicalmente el cabotaje, es decir, la posibilidad de que una compañía europea pueda operar vuelos internos en los Estados Unidos, por ejemplo entre Nueva York y Miami. En cualquier caso, la Comisión no aceptará que se mantengan los acuerdos bilaterales de «cielos abiertos» que mantienen 15 Estados miembros con los EE.UU., mientras que los otros 10 no cuentan con esta ventaja. El Tribunal de Justicia de Luxemburgo declaró ilegales algunas de sus cláusulas, especialmente la que permite discriminar a las compañías en los aeropuertos en razón de su nacionalidad.